Ni los dos terceros puestos consecutivos en dos circuitos tan diferentes le van a hacer cambiar un ápice al piloto asturiano su discurso. Sabe que la distancia con los Red Bull aún es demasiado grande como para pensar que, en condiciones normales, se les pueda discutir la victoria.
Aun así, el de Aston Martin no puede ocultar que tiene buen feeling con su coche. Y así llega al tercer Gran Premio de la temporada. "Llegamos a Australia con buenas sensaciones después de haber sumado dos podios consecutivos y esperamos seguir mejorando estos resultados este fin de semana", ha comentado.
Un optimismo que viene refrendado porque "el coche ha funcionado bastante bien en dos circuitos diferentes", pero que deja ahí por si a alguien se le ocurre exigirle algo más. "Seguimos con los pies en el suelo y somos realistas en que, para seguir obteniendo buenos resultados, tenemos que rendir en todas las áreas del equipo".
En ello están en la escudería, ahora mismo por delante de Mercedes y Ferrari en prestaciones. Será, pues, una dura prueba esta de Australia para confirmar las expectativas creadas y si son capaces de mantenerse en ventaja con los dos 'dinosaurios'. Lo que sí sabe Alonso es que es muy divertido conducir en Albert Park. "Siempre es una carrera divertida y tengo curiosidad por ver las diferencias con años anteriores. Va a ser incluso más rápido que el año pasado y espero que veamos más adelantamientos".
A pesar de esa posibilidad, la clave será la de todos los fines de semana, estar fuerte el sábado para conseguir el mejor lugar posible en la parrilla y evitar problemas en la salida. "La clasificación será probablemente fundamental en Albert Park, así que tenemos que asegurarnos de hacer un sábado fuerte que nos coloque en la mejor posición posible para sumar el mayor número de puntos posible".