Fue uno de los integrantes de la última lista del seleccionador antes de la cita del próximo mes, un argumento para pensar en que será llamado por el asturiano, aunque también es cierto que ni mucho menos le garantiza estar en Catar. Se tuvo que conformar con disputar cuatro minutos en la derrota contra Suiza (1-2) y rozó la hora de juego en el triunfo ante Portugal (0-1). No es ni mucho menos uno de los fijos y la suerte está echada.... o no, porque hasta el día 11, cuando se dará a conocer quiénes van, puede haber algunos cambios.
Carlos Soler se marchó traspasado al PSG por 18 millones de euros y otros cuatro variables. Cuando Gennaro Gattuso llegó a Mestalla sabía que alguna baja importante se iba a producir, aunque el italiano ha salido mejor parado que otros técnicos en el apartado de incorporaciones (Edinson Cavani, André Almeida, Nico González y algunos más). Sin lugar a dudas, el internacional español y José Luis Gayà, otro que se suele poner la camiseta de la Roja, eran los dos jugadores con mayor mercado a nivel nacional y europeo.
El 31 de agosto, al límite de que terminara la ventana de traspasos veraniega, el conjunto del Turia hizo oficial la salida de uno de los jugadores más queridos por la afición, sobre todo por aquello de ser canterano y poder acumular la que hubiera sido la séptima temporada en el primer equipo, donde ha competido en Champions League, torneo en el que llevaba tres goles hasta este martes 25 de octubre. Su última diana en Europa fue a finales de 2019 (Valencia 2-2 Chelsea).
El triunfo ante el Girona
Soler llevaba ya más de dos meses sin poder celebrar un gol. El atacante tuvo un papel decisivo en el primer encuentro oficial de su exequipo, el del estreno ante el Girona en Mestalla a mediados de agosto. Los locales ganaron por la mínima (1-0) y el '10' fue el gran protagonista del choque. Esos tres puntos tuvieron que ver para que el Valencia esté ahora entre los diez primeros clasificados (noveno, con 15, los mismos que el Rayo Vallecano y uno más que el Real Valladolid).
Quizá, casi seguro, podía intuir entonces que ese gol tenía cierto regusto a despedida porque solo había dos caminos posibles: renovación o venta. Aún restaban varios días para que terminara el mercado, así que Carlos tuvo la oportunidad de jugar dos partidos más, aunque ambos acabaron en derrota: 1-0 ante el Athletic Club en San Mamés y 0-1 en casa frente al Atlético de Madrid. Este último se disputó tan solo dos días antes de que se certificara su marcha.
Con un papel secundario en París
Como el propio jugador podía pensar cuando llegó a la capital francesa, Soler tiene un rol muy diferente al que disfrutaba en Valencia, donde no era uno más en la plantilla, sino uno de los capitanes (además de ser un indiscutible para todos los entrenadores). En dos semanas y tres partidos en 'casa', sumó 242 minutos; con la camiseta del PSG, sin embargo, en casi dos meses y 12 ocasiones posibles acumula 166, una comparación que habla por sí sola, aunque fue de la partida en el último encuentro y este tanto le puede abrir alguna puerta más.
Pese a estos números, el talentoso futbolista aspira a ser uno de los elegidos por Luis Enrique, que tiene muchísimos candidatos para esa zona (Pedri, Gavi, Fabián, Canales, Brais y muchos más). Veremos si la escasa participación -dos titularidades y en ningún caso los 90 minutos-, acaba por convertirse en un factor decisivo, pese al gol que anotó frente al Maccabi Haifa en la quinta jornada de la fase de grupos de la Champions League, para que se quede sin ir al Mundial de Catar.