Borja Bastón (30) se va a reencontrar con el Atlético de Madrid este miércoles (20h00 CET) en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. El experimentado atacante se crió en la cantera del conjunto rojiblanco, pero nunca llegó a disfrutar en la capital (más allá de debutar con el primer equipo en un partido de infausto recuerdo contra el Getafe porque los azulones ganaron por 0-3).
El atacante encadenó varias cesiones hasta que se marchó traspasado al Swansea de la Premier League, club al que llegó traspasado por 18 millones de euros después de su gran hacer en el Eibar. Fue un producto de la cantera más que rentable para la entidad del Metropolitano pese a su testimonial trayectoria y bastó con una decisión acertada en cuanto al destino para sacar unos beneficios más que considerables.
Después de estrenarse en la élite con el club donde creció, tuvo varias aventuras en la categoría de plata del fútbol español (Murcia, Huesca, Deportivo de la Coruña y Zaragoza). Fue de menos a más en lo que a goles se refiere hasta el punto de celebrar 23 dianas en el equipo maño, un rendimiento espectacular para un futbolista aún por descubrir. Una vez se entendió que estaba listo para dar el paso y pasar a LaLiga Santander, llegó al equipo armero, donde anotó 19 tantos entre las dos competiciones.
La salida a Inglaterra no salió nada bien. Tuvo que salir de nuevo cedido, esta vez de vuelta a España (Málaga y Alavés), aunque vivió una segunda etapa en el mencionado Swansea para intentar el regreso a la división de oro tras sufrir un doloroso descenso. Marcó seis goles, pero se marchó como agente libre al Aston Villa, donde apenas estuvo medio año y tan solo jugó dos encuentros. Tampoco movió dinero cuando llegó al Leganés, muy lejos de sus mejores registros de cara a portería (cinco en 36 encuentros).
Clave en el Oviedo
Cuando pocos esperaban la versión sobresaliente de Bastón, Oviedo hizo resurgir al delantero madrileño. Los asturianos soñaron con el ascenso hace tan solo unos meses, pero se quedaron al borde del sexto puesto y no pudieron disputar los playoffs. Sus 24 dianas en 42 participaciones (entre LaLiga y la Copa del Rey) demuestran la importancia que tuvo (y tiene) en el equipo que ahora se encuentra a cinco puntos del Granada, el primero de los aspirantes a volver a Primera porque es quien marca el corte.
Lo visto en la pasada campaña no parece ser casualidad. Borja, pese al peor rendimiento colectivo de los carballones (ya han cambiado de entrenador), está mantiendo un promedio similar al de los meses pasados. Son ocho los goles que ha anotado por el momento en 21 partidos ligueros, lo que le permite estar entre los máximos realizadores de la competición (ya fue pichichi junto a Stuani en la anterior).
Vestido con la camiseta azulona podrá disfrutar de un partido muy emocional para él, aunque está por ver si Álvaro Cervera decide contar con su mejor jugador o decide reservarlo para el torneo liguero, que es el que da de comer a todos los clubes. Cabe recordar que ya fue suplente en el duelo frente al Granada de la ronda anterior (1-0) y se tuvo que conformar con disputar un solo minuto, por lo que no sería muy extraño que volviera a estar en el banquillo.