Los Knicks derrotan a los Sixers en un partido vibrante en el Madison

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Los Knicks vencen a los Sixers en un final de locura en el Madison
Jalen Brunson, de los Knicks
Jalen Brunson, de los KnicksAFP
Con una remontada de infarto en los últimos segundos, los New York Knicks derrotaron el lunes 104-101 a los Philadelphia 76ers y se adelantaron 2-0 en esta serie de primera ronda de los playoffs de la NBA.

En otro de los partidos del lunes, los Cleveland Cavaliers también se avanzaron 2-0 ante los Orlando Magic con un triunfo por 96-86.

La jornada se cerraba en Denver con el choque entre Los Angeles Lakers de LeBron James y los Denver Nuggets de Nikola Jokic, vencedores del primer duelo.

Knicks y Sixers brindaron un choque de máxima intensidad e igualdad que se resolvió a favor de los locales con un último medio minuto de locura en el Madison Square Garden neoyorquino, plagado de celebridades como Sting, Selena Gómez o la exfigura del equipo Carmelo Anthony.

Después de varias fabulosas canastas del joven Tyrese Maxey, que logró 35 puntos, los Sixers dominaban por cinco puntos (96-101) hasta que, con sólo 27 segundos en el reloj, Jalen Brunson recortó la distancia con un triple.

Tras sacar desde debajo de su aro, Maxey perdió la pelota en el suelo en medio de la feroz defensa de Brunson y Josh Hart, en una acción que los Sixers reclamaron como falta.

Donte DiVincenzo falló un primer intento de triple pero el pívot Isaiah Hartenstein capturó el rebote ofensivo y le permitió anotar el tiro exterior a la segunda oportunidad, avanzando a los Knicks en el marcador a 13 segundos del final en medio del éxtasis en las gradas del Madison.

El propio Hartenstein colocó después un tapón a Maxey y Joel Embiid falló un triple muy forzado sobre la bocina en un intento por forzar la prórroga.

"Han habido finales muy salvajes, pero este está entre los mejores. Esto muestra cómo son los playoffs", dijo el entrenador de los Knicks, Tom Thibodeau.

Protestas de los Sixers 

Jalen Brunson volvió a ser el máximo anotador de los locales con 24 puntos, mientras que el alero Josh Hart logró 21 tantos y 15 rebotes.

Por los Sixers, Maxey bordeó el triple doble con 35 puntos, 15 de ellos en el último cuarto, con 9 rebotes y 10 asistencias en un partido que jugó aquejado de una enfermedad.

El camerunés Joel Embiid, que sumó 34 puntos y 11 rebotes, protestó contra la actuación arbitral por no señalar falta en la pérdida de balón final de Maxey.

"Es inaceptable perder un partido así, especialmente en playoffs", reclamó el vigente MVP (Jugador Más Valioso) de la liga, que se mostró convencido de que su equipo se repondrá de esta desventaja.

"Deberíamos estar 2-0. Somos buenos y vamos a ganar esta serie", sostuvo Embiid. "Sabemos lo que tenemos que arreglar. Hicimos un mejor trabajo hoy. Somos el mejor equipo y vamos a seguir luchando".

El técnico de los Sixers, Nick Nurse, dijo que los árbitros ignoraron varios pedidos suyos de tiempo muerto durante la jugada clave. Según ESPN, Philadelphia tiene previsto presentar una queja ante la NBA por el arbitraje en estos dos primeros partidos de la serie.

Los Sixers hospedarán los dos próximos juegos de la eliminatoria en su cancha el jueves y domingo.

Los Cavaliers vuelven a ganar 

En el primer partido del lunes, los Cleveland Cavaliers derrotaron 96-86 a los Orlando Magic y se avanzaron 2-0 en esta serie del Este.

El escolta Donovan Mitchell volvió a comandar el ataque de los Cavaliers ante su público en el Rocket Mortgage FieldHouse con 23 puntos.

Los Magic, que arrancaron otra vez sin un pívot puro, se vieron sobrepasados en la pintura por las dos torres de Cleveland, Jarrett Allen (16 puntos y 20 rebotes) y Evan Mobley (17 y 7).

Paolo Banchero, estrella de los Magic, terminó con 21 puntos, 3 rebotes y 3 asistencias con 6 pérdidas de balón. Compitiendo en sus primeros playoffs, el pívot All-Star se está resintiendo de la mayor intensidad defensiva y acumuló un total de 15 pérdidas en los dos primeros partidos.

Orlando, clasificado a la postemporada por primera vez desde 2020, fue a remolque desde el principio del juego y se marchó de Cleveland sin haberse puesto por delante en el marcador en ninguno de los dos primeros partidos.