En Milwaukee, los Bucks se anotaron el primer triunfo de la serie ante los Indiana Pacers por 109-94 sin su líder, Giannis Antetokounmpo, por la lesión muscular que sufrió al final de la fase regular.
Damian Lillard, el gran fichaje del año de Milwaukee, tomó las riendas frente a su público con 35 puntos, todos ellos convertidos en una explosiva primera mitad.
El base, ocho veces All-Star, fijó así el récord de anotación de cualquier jugador de los Bucks en una mitad de partido en playoffs.
Lillard apabulló a la defensa de los Pacers con seis triples que marcaron el camino del primer triunfo en estos playoffs, en los que aspira a conquistar su primer anillo.
A lomos de Lillard, que en la segunda mitad erró sus cinco lanzamientos, Milwaukee llegó a tener una cómoda ventaja de 30 puntos frente a unos Pacers que pagaron su inexperiencia después de cuatro años ausentes de la postemporada.
El base All-Star Tyrese Haliburton, elegido por delante de Lillard para el combinado estadounidense de los Juegos Olímpicos de París, naufragó en su debut en playoffs con apenas 9 puntos y 8 asistencias.
El único jugador de Indiana que estuvo a la altura fue el camerunés Pascal Siakam, ganador del título en 2019 con los Raptors, que terminó con 36 puntos y 13 rebotes.
Los Celtics pisan fuerte
En el primer partido del domingo, los Boston Celtics comenzaron su recorrido con una contundente victoria 114-94 frente a los Miami Heat, que compiten sin su estrella Jimmy Butler.
El novato mexicano-estadounidense Jaime Jáquez Jr. sobresalió con 16 puntos para los Heat, vigentes subcampeones, que se presentaron en el TD Garden sólo dos días después de sellar su pase a la postemporada en el repechaje.
Boston, el mejor equipo de la fase regular, tuvo el control del juego desde el parcial inicial de 14-0 y llegó a disponer de una ventaja de 34 puntos que los aguerridos Heat recortaron en el último cuarto.
El alero Jayson Tatum firmó el primer triple doble de su carrera en playoffs con 23 puntos, 10 rebotes y 10 asistencias.
La jornada del domingo concluía con el duelo inicial entre los Oklahoma City Thunder, sorprendentes líderes del Oeste, y los New Orleans Pelicans.