Málaga es sinónimo de baloncesto. Desde aquel triple fallado por Ansley en Ciudad Jardín, en la final de la ACB de 1995 ante el Barcelona, en un equipo en el que estaban Nacho Rodríguez o Babkov hasta la época gloriosa de Scariolo. Con el seleccionador nacional, el Unicaja conquistó la Copa del Rey de 2005 ante el Real Madrid y en 2006 ganó la ACB. Un año después, acabó tercero en la Euroliga.
Un auténtico equipazo, con campeones del Mundo como Berni Rodríguez, Cabezas y Garbajosa, pero también con jugadores extranjeros de altísimo nivel como Pepe Sánchez, Marcus Brown, Daniel Santiago o Marcus Haislip.
La crisis de principios de década
El Unicaja atravesó recientemente momentos de crisis, que hicieron temblar los cimientos del club. Después de que años atrás la Euroliga, en un decisión incomprensible, le dejara fuera de la competición para hacerla más cerrada, los malagueños respondieron en la 2016-2017 ganando la Eurocup. Año tras año seguían entrando en playoff.
Pero en la 2020-2021 y en la 2021-2022 el equipo tocó fondo. Uno de los grandes del baloncesto español se quedó dos temporadas consecutivas sin jugar playoff, finalizando en undécima y duodécima posición. En 2022 ni siquiera jugó la Copa.
La revolución de Ibon y los americanos
Pero todo eso cambió en la 2022-2023 con la llegada de Ibon Navarro al banquillo y un equipo renovado. Con un jugador de la casa como Alberto Díaz, de nuevo un campeón con España -en este caso de Europa- en la plantilla de un gran Unicaja, los estadounidenses han rendido a las mil maravillas. De este manera, los Dylan Osetkowski, Tyler Kalinoski, Tyson Carter, David Kravish o el nacionalizado montenegrino Kendrick Perry han construido una escuadra imbatible.
La temporada pasada sorprendieron a propios y extraños y ganaron su segunda Copa del Rey, derrotando a Barcelona, Real Madrid y Lenovo Tenerife. En la Champions League fueron semifinalistas y en ACB también llegaron a la penúltima ronda.
Este año, acumulan 11 victorias consecutivas, son el único equipo que ha ganado al Madrid y además en el WiZink, van segundos en la tabla con 12 victorias y tres derrotas y tienen mucho que decir. El próximo miércoles reciben al Barcelona en el Martín Carpena. Hay Unicaja para rato.