Facundo Campazzo (32) paso el reconocimiento médico este martes y se convirtió en nuevo jugador del Real Madrid. Citado en el Hospital Universitario Sanitas La Moraleja, superó las diferentes pruebas físicas y, por tanto, está ya preparado para arrancar la pretemporada. Vuelve tres años y siete meses después de poner rumbo a la NBA, competición en la cual llegó a tener un papel muy importante en Denver Nuggets y bastante menos trascendente en Dallas Mavericks.
"Gente con la que me sigo relacionando desde que me fui hasta el día de hoy como el presidente, la dirección, amigos, jugadores, staff, del carrito… Con mucha gente he seguido en contacto. Las relaciones que he dejado aquí, amigos y compañeros, son las que más extraño y eso me ha empujado también a volver. A mi familia le encanta Madrid y el equipo. Mi hija nació aquí y era muy importante la comodidad para estar tranquilo, y ellos están felices", explicó el base.
El ex del Estrella Roja dice que se siente "bien físicamente" e incluso considera que es "mejor jugador" respecto a cuando se fue, si bien sabe que las palabras vuelan y va a tener que demostrarlo "en el día a día". Por otro lado, prometió dar "el cien por cien" y estará a disposición de Chus Mateo para "lo que necesite" y todo lo que le pida. "Hay que trabajar duro, seguir intentando conseguir los objetivos, pelear por títulos y ser parte de este equipo que intenta conseguir todo siempre", apuntó.
Con ganas de volver al WiZink
Consciente de que hablar del Madrid es hacer referencia inevitablemente a los títulos, fue contundente a la hora de afirmar su intención por "entregar todo en cada partido" para poder pelear "por las cosas importantes". En el apartado individual, en cambio, destacó su identidad y corazón para vaciarse cada vez que se ponga la camiseta blanca "desde la defensa y en el ataque". Intentará, asegura, hacer notar su experiencia y adaptarse al plantel que defenderá la gloria europea durante el curso 2023/24.
"Desde que fui parte de este equipo se me ha mostrado mucho cariño siempre y tengo ganas de volver al WiZink Center y vivir un partido", concluyó Campazzo, quien le agradeció el apoyo a una afición que disfrutará de nuevo de un jugador que aspira a seguir ampliando su palmarés en España. Dados los refuerzos de su principal rival, el Barcelona (con Darío Brizuela y Willy Hernangómez entre las incorporaciones confirmadas), no se presenta como una tarea sencilla.