Y no es una lesión sencilla. Se trata de una fractura del dedo meñique de su mano izquierda. Un percance que le ocurrió durante un entrenamiento y que le va a dejar en el dique seco durante los dos próximos meses.
En la mañana de este miércoles ha sido ya intevenido para reducir esa rotura ósea por el doctor Nikolaos Souras y el médico del equipo, Athanasios Konidis.
Si ya le estaba costando coger el ritmo de competición, ahora será más complicado todavía para el alero español en el momento en el que regrese tras una larga inactividad. Otra más.
Hay que recordar que Juancho Hernangómez estuvo sin competir los últimos meses de la temporada NBA, pues se quedó sin contrato tras ser cortado por Toronto Raptors y ninguna franquicia se interesó por él. Volvió a jugar ya con la selección española en el Mundobasket, pero su inactividad le pasó factura y estuvo lejos de ser aquel jugador resolutivo del verano anterior en el Europeo.
Tras su fichaje por el Panathinaikos, se esperaba ver su mejor versión, pero esa sólo ha aparecido a cuentagotas. Quizás en el derbi ante Olympiakos, pero poco más. Tanto que Ataman, su controvertido entrenador en el cuadro griego, no dudó en echarle gran parte de la culpa de la sonrojante derrota ante el Barcelona en la Euroliga (llegaron a ir perdiendo de 24 puntos) hace dos semanas.
Sus números en la máxima competición continental son muy pobres para lo que se esperaba de uno de los jugadores con ficha de estrella: 4.5 puntos y 5 rebotes por partido en 22:30 minutos de media. Y con muy malos porcentajes de tiro.
Y ahora le llega esta lesión, lo que ha hecho que el Pao esté pensando en acudir al mercado para encontrar un sustituto temporal.