Dos grandes del baloncesto continental, con seis títulos cada uno, han ofrecido una eliminatoria épica, resuelta en este quinto partido, en un escenario mítico como el OAKA. Panathinaikos y Maccabi Tel Aviv han llevado la serie al límite.

Y el quinto partido no se ha decidido hasta el último cuarto, cuando un gran trabajo defensivo de los helenos secó al Maccabi durante los cuatro primeros minutos de dicho período. El Maccabi tuvo ligeras ventajas durante el resto del partido. Pero espoleado por una hinchada enfervorecida, que invadió la pista al final del encuentro, con un parcial de 23-16 en los 10 minutos finales, el Panathinaikos consiguió volver a una Final Four 12 años después.

Además de Kendrick Nunn, cuya participación en el último cuarto anotando, especialmente de tres, pero también en defensa, fue determinante, en el Panathinaikos destacó la dirección de Kostas Sloukas, con 15 puntos y seis rebotes. El base griego en su estreno de verde ha conseguido el objetivo de entrar entre los cuatro mejores de Europa, pero terminó el partido lesionado. Tiene 17 días para recuperarse. 

Buena actuación de los españoles

Los dos representantes del baloncesto nacional en Atenas hicieron un buen partido. Juancho Hernangómez anotó 11 puntos en el Panathinaikos, mientras que en el Maccabi Lorenzo Brown firmó 19 unidades, cuatro rebotes y siete asistencias para garantizar los 24 créditos.

En los israelíes, Josh Nebo también firmó un 14+7. El Maccabi ha completado una buena temporada en Euroliga que se queda sin premio, condicionada por la guerra contra Hamás y el consiguiente traslado de su sede de Tel Aviv a Belgrado. Aún así, han llegado hasta el quinto partido de los cuartos de final y con opciones de competir en todo momento.

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