Fernando Alonso, aún molesto por la sanción en Melbourne, tuvo que sacar todo su repertorio para no perder el importante botín que tenía entre manos. Afrontaba una prueba complicada dado el bajo ritmo de un monoplaza que exprime al máximo en cada competición. Y este domingo 7 de abril no iba a ser ninguna excepción, reto que superó de forma holgada... e incluso con matrícula de honor según sus propio análisis.
"Me he sentido muy bien. Es la mejor carrera en un año. Desde abril o mayo del 2023, creo que no había tenido un fin de semana tan completo como este. Seguramente esté entre las cinco mejores que he hecho. Nadie se acordará de Suzuka 2024 porque he acabado sexto después de ser quinto en la crono, pero Red Bull y Ferrari están en otra liga aparte y tanto McLaren como Merecedes están por delante de nosotros. Nuestra posición natural es noveno y décimo", explicó en DAZN.
El piloto de Aston Martin es consciente de que el hecho de haberse quedado a una importante distancia del podio da pie a que el Gran Premio de Japón vaya a quedar en un segundo plano, pero él le da un valor inmenso. "Lo de ayer fue un pequeño milagro y lo de hoy ha sido un gran milagro. La voy a tener siempre en mi memoria, pero será abandonada por el público en general dentro de dos o tres días", apuntó.
"No sé qué decir ya después de Australia, igual me descalifican para el resto del campeonato. Está claro que teniendo a (Oscar) Piastri detrás era una forma de defenderme de (George) Russell. Seguramente quitaba un poco de batería en la última recta para que Piastri se acercara a un segundo. Creo que también lo utilizaba Carlos (Sainz) el año pasado en Singapur, darle el DRS al segundo para protegerse del tercero. Es una cosa normal, como hacemos en todas las carreras", agregó.