El naufragio de Loeb en la penúltima etapa dejó despejado el camino para que Carlos Sainz ganara su cuarto rally Dakar. El español se mostró cauto después de la jornada, quedaba una especial de 175 kilómetros alrededor de Yanbu por delante en la que había que evitar cometer errores.

Junto a su compañero Lucas Cruz consiguió cerrar la carrera sin sobresaltos y convertirse, con 61 años, en el segundo piloto de coches, después de Peterhansel, en ganar con cuatro marcas diferentes (Volkswagen 2010, Peugeot 2018, Mini 2020 y Audi 2024). A eso, le agregó el hito histórico de ser el primero que se corona conduciendo un coche con propulsión híbrida.

La etapa de cierre de la 46ª edición del legendario desafío se antojaba relativamente sencilla con la hora y 26 minutos de diferencia que tenía 'El Matador' sobre De Mevius, segundo clasificado de la general. Con esa ventaja, no le tembló el pulso y cerró el ciclo de Audi en el Dakar bañándose en oro.

En la meta, las emociones estaban a flor de piel. Al bajarse del coche después de terminar, su hijo, Carlos Sainz Jr. estaba esperando al veterano piloto para recibirle con honores bien merecidos por colocarse, junto a un cruz que ha estado en todos sus triunfos, entre los mejores de siempre en la mítica prueba (ya solo tienen más victorias que él Peterhansel y Al-Attiyah)

La diferencia final entre el madrileño y su más inmediato perseguidor, De Mevius, fue de una hora 20 minutos y 25 segundos. Sébastien Loeb tiró de orgullo tras los problemas de la etapa 11 y cerró su participación siendo el mejor de la última (1H:39:41) y quedando tercero de la general a 1H:25:12 del español de Audi.

Incombustible

Destaca, además del ya de por sí excepcional hecho de ganar el Dakar, el haberlo logrado con 61 años. Carlos es el más veterano en conseguir dicha gesta en categoría de coches. Un récord que ya tenía en su haber tras ser primero, con 57 primaveras, en la edición de 2020.

La plusmarca absoluta la ostenta Josef Machacek, ganador de la categoría de prototipos ligeros en 2021 con la friolera de 63 años.

Una dupla perfecta

Sainz y Cruz han realizado una carrera prácticamente sin fallos. La regularidad ha sido su fuerte. Sólo hace falta fijarse en que han resultado campeones sin ganar ni una sóla etapa, algo de lo que únicamente pueden presumir los hermanos Marreau (1982), Jutta Kleinschmidt (2001) y Peterhansel (2007).

Además, cuando se han visto en problemas serios, como con los tres pinchazos de la etapa 10, el equipo ha respondido a las mil maravillas para llevar en volandas hacia la gloria a Carlos y Lucas.

A partir de las 19.00 horas en España, serán coronados durante la ceremonia de entrega de trofeos de la 46ª edición del rally Dakar.