El serbio, que aspira a su undécima corona en Melbourne, se vio en serios aprietos en el tercer set, cuando los errores empezaron a sucederse y tuvo que salvar cuatro bolas de set.

Con el público nocturno al borde de sus asientos, Djokovic, primer cabeza de serie, hizo valer su vasta experiencia para ganar el decisivo desempate y luego rompió a un desanimado Popyrin a mediados del cuarto set para hacerse finalmente con el control.

Djokovic superó sin problemas ese cuarto set para sumar su 30ª victoria consecutiva en el Abierto de Australia -su última derrota se produjo en 2018-, pero por segunda ronda consecutiva fue presionado duramente y se vio lejos de su mejor forma.

"Falló una derecha fácil y tuve suerte de salirme con la mía en ese juego", dijo en la pista Djokovic, que fue increpado por un aficionado que le abucheaba cuando el partido estaba a punto de concluir.

"Fue el mejor jugador durante un set y medio, pero el impulso cambió tras el tiebreak".

Más tiempo en pista de lo habitual

Djokovic, que aspira a conquistar su 25º título de Grand Slam, permaneció en la pista durante cuatro horas en su victoria en la primera ronda contra el croata Dino Prizmic el domingo.

Pero cuando se llevó el primer set contra Popyrin en 39 minutos, habiendo perdido sólo tres puntos con el saque, parecía que la victoria iba a ser más rutinaria. Tenía un récord de 13-1 contra jugadores australianos en Grand Slams, pero Popyrin, de 24 años, no estaba dispuesto a rendirse dócilmente, y con su saque y su derecha empezó a hacer mella en la armadura del serbio.

El público se animó cuando su favorito dispuso de un punto de ruptura con 1-2 en el segundo set y Popyrin lo convirtió con una hábil volea.

Sin embargo, Popyrin flaqueó, sirviendo para el set en el 5-3 y cometiendo algunos errores que dieron el break a Djokovic. Pero en el siguiente juego, fue el turno del número 1 de tambalearse y su cada vez más irregular derecha  ofreció un par de puntos de set. Salvó uno con un ace, pero Popyrin, que necesitó tratamiento en la pantorrilla a mitad del tercer set, realizó un impresionante globo para empatar el partido.

Con 4-5 en el saque, la tensión aumentó cuando Djokovic falló una derecha, luego una volea fácil y después estrelló una derecha en la red para disponer de tres puntos de set. El balcánico se mantuvo firme y salvó los tres, pero Popyrin tuvo una cuarta oportunidad.

El número 43 del mundo tuvo que lamentar esas oportunidades perdidas, ya que su rival dominó el tie-break y se hizo con la victoria a pesar de que algunos ruidosos aficionados hicieron todo lo posible por sacarle de su ritmo.

La forma de Djokovic dará esperanzas a su rival en tercera ronda, el argentino Tomas Etcheverry. "Sentí muchas emociones encontradas en la pista, no era un buen ambiente para jugar", dijo Djokovic a Eurosport. "Es frustrante cuando tienes a abucheadores".

Preguntado por su estado físico, un Djokovic resfriado dijo: "No quiero entrar en detalles sobre cómo me siento, pero no me siento en mi mejor momento. Pero he estado en esta situación muchas veces".