El Sevilla sigue moviéndose en el mercado invernal de fichajes. A las incorporaciones de Loïc Badé y Lucas Ocampos, el club hispalense ha añadido el regreso del que fue una de sus perlas de la cantera, Bryan Gil.
El extremo jugará a las órdenes de Jorge Sampaoli hasta final de la presente temporada 2022-2023 en calidad de cedido y sin opción de compra, por lo que solo estará cinco meses en el equipo que le vio crecer como futbolista y que le traspasó por 25 millones de euros en verano de 2021.
La falta de continuidad en el Tottenham es la que ha propiciado la marcha temporal de Gil de la Premier League. Antonio Conte, el entrenador de los londinenses, solo le había dado 310 minutos al extremo español divididos en 11 partidos (una media de menos de 30 minutos por encuentro), en los que el de Barbate tan solo pudo contribuir con una asistencia.
De este modo, Sampaoli ya tiene lo que quería en la lucha que los de Nervión están librando por no descender de categoría. Un futbolista de ataque con velocidad y desborde por los flancos al que ya alabó recientemente y reveló que le sigue desde hace años: “Ya le llamé cuando yo entrenaba en Marsella y creo que nos daría mucho en la banda”, comentó el técnico argentino.