Con ese triunfo, Roglic, que regresaba después de siete años de su primera y última aparición en la prueba, también se ha vestido de líder en esta carrera que consta de siete etapas y finalizará este domingo en Barcelona. 

En esta primera, con cuatro puertos de montaña puntuables -el Alt de Santa Pellaia, el Alt dels Àngels, el Alt de la Ganga y el Alt de Romanyà-, han sido cinco los ciclistas que han intentado romper las hostilidades: Jetse Bol, Alessandro De Marchi, Rune Herregodts, Pau Miquel y Oscar Onley. El primero de ellos se ha colocado al frente de la clasificación de la montaña. 

Pero no ha servido esta escapada para luchar por el triunfo, pues el Jumbo Visma quería preparar el final para Roglic, su jefe de filas. Y le ha salido de maravilla para que el triple vencedor de la Vuelta a España consiguiera el triunfo con autoridad.

En el aspecto negativo, una caída múltiple en la que el principal afectado ha sido el italiano Dario Cataldo, quien ha sufrido múltiples fracturas: del fémur izquierdo, de la cadera, dos transversales de la columna lumbar sin impacto neurológico, la clavícula izquierda y múltiples costillas rotas con un pulmón colapsado en ambos lados. Por suerte, el ciclista ha estado consciente y estable, si bien deberá ser operado del fémur para reducir la rotura. 

La Volta a Catalunya 2023, mientras, seguirá este martes con la segunda etapa, que unirá Mataró y la estación de esquí de Vallter en un recorrido de 165,4 kilómetros. El Coll de Coubet (1ª categoría) y el ascenso final a Vallter (categoría especial) supondrán un reto de altura para los ciclistas. Se espera un nuevo duelo entre Roglic y Evenepoel (23).