El ex legislador del Partido Conservador, de 60 años, habló desde su experiencia, ya que los disturbios también se apoderaron de Londres y otras zonas urbanas de Inglaterra en 2011, tras el tiroteo mortal de un joven a manos de la policía.

"Cuando le ocurrió a Londres 2012, en un momento similar de los Juegos, todos los Comités Olímpicos Nacionales (CON) y las Federaciones Internacionales (FI) de todo el mundo acababan de llegar a Londres para ver las instalaciones", dijo a AFP.

"Recuerdo que, como Ministro encargado de los Juegos Olímpicos, me dirigí a los jefes de los CON y de las FI en el edificio del alcalde, en South Bank.

"Mientras yo decía que no hay nada de qué preocuparse, se veían columnas de humo detrás de mí en el sur de Londres".

La violencia y los saqueos golpearon Francia en una cuarta noche de protestas el viernes y el país se había preparado para los desórdenes antes del funeral del sábado por Nahel, de 17 años, que murió a manos de un agente durante un control de tráfico.

El gobierno declaró que la violencia había "disminuido" en comparación con noches anteriores, pero el Ministerio del Interior informó de 1.311 detenciones en todo el país durante la noche y de 79 heridos entre policías y gendarmes.

Esta cifra es superior a la de cualquier otra noche desde que comenzaron las protestas el martes, desencadenadas por la muerte de Nahel.

Los disturbios de Londres se prdujeron a raíz de la muerte de Mark Duggan -que recibió un disparo después de que la policía detuviera el coche en el que viajaba- y tuvieron lugar del 6 al 11 de agosto, con el resultado de cinco muertos y daños por valor de cientos de millones de libras.

Robertson -que se retiró de la política de primera línea en 2015 y es presidente de la Asociación Olímpica Británica (BOA) desde 2016- dijo que el momento de los disturbios de Londres no podría haber sido peor.

'El swing detrás de los Juegos'

Robertson no se inmutó a pesar de la violencia en la que se vio envuelta la capital británica durante su visita e instó a los organizadores de París a mantener el rumbo.

"Mantengan la calma y la concentración", afirmó.

"Los organizadores cuentan con mi simpatía y estoy seguro de que lo solucionarán.

"Todavía falta más de un año para la ceremonia de apertura, lo cual es mucho tiempo para organizar algo tan importante como unos Juegos Olímpicos".

Robertson afirma que hay poco peligro de que las imágenes difundidas por todo el mundo desanimen a la gente.

"¡Ninguno! Faltan 14 meses para la ceremonia de inauguración.

"La gente que ya ha comprado entradas para París vendrá de todos modos; otros pensarán que queda muy lejos, así que no se disuadirán de venir".

El ex oficial del ejército británico afirma que los disturbios no eran la principal preocupación a la que se enfrentaban los responsables de los Juegos de Londres antes del espectáculo deportivo.

"Los problemas con la seguridad eran más angustiosos", afirma.

"Siempre pensamos que los disturbios pasarían".

Robertson afirma que, aunque a algunos les preocupaba que los alborotadores intentaran utilizar los Juegos de Londres como un acontecimiento de gran repercusión para provocar disturbios, él y los organizadores eran mucho más positivos.

"Lo que todo el mundo no entiende de los Juegos Olímpicos es que siempre llega un momento en que la gente se da cuenta del maravilloso escaparate que son para un país y se vuelca con los Juegos", afirma.

"Para nosotros llegó un mes antes de que empezaran los Juegos, cuando la inmensa mayoría de la gente decidió que quería que fueran un éxito".

"Estoy seguro de que en Francia ocurrirá lo mismo, y los franceses harán un trabajo maravilloso y ofrecerán una acogida fantástica".

Robertson dice que sabe por amarga experiencia que habrá más baches en el camino para los jefes de París.

"Todos los Juegos Olímpicos tienen estos momentos" , afirmó.

"En los próximos 13-14 meses surgirá algo más.

"Está en la naturaleza de la organización de algo tan grande como unos Juegos Olímpicos que habrá muchos retos para cualquier Comité Organizador".