Malos tiempos para Neymar. A los rumores sobre su mala relación con otra de las estrellas del PSG, Mbappé, se le suma el caso que lleva coleando en los juzgados brasileños y españoles casi una década.
Todo comenzó en 2013 cuando llegó al Barcelona procedente del Santos. En un principio, y de manera oficial, el acuerdo para su traspaso se firmó en 24 millones de euros. DIS, que poseía el 40% de los derechos de venta, descubrió, según sus informaciones, que la cantidad de venta fue mucho mayor, en concreto de 84 millones de euros (24 para Santos y 60 para la familia de Ney).
En aquella transferencia, participaron Sandro Rossell y Josep María Bartomeu, ex presidentes del Barcelona, y el ex dirigente del Santos Odilio Rodrigues. También están acusados los padres de Neymar y los dos clubes.
Neymar y el resto de implicados han negado las acusaciones una y otra vez, pero el futbolista ya perdió una apelación en el Tribunal Superior de Justicia de España en 2017, lo que allanó el camino para el juicio.
Lo que solicita el fondo de inversión DIS, que considera que la venta oficial estuvo muy por debajo de su valor de mercado, es penas de cárcel para Rosell y Bartomeu, así como una multa de 149 millones de euros.
La fiscalía española, por su parte, pide dos años de prisión para Neymar y el pago de una multa de 10 millones de euros, y cinco años de cárcel para Rosell más una multa de 8,4 millones de euros para el Barcelona.
"Los derechos de Neymar no se vendieron al mejor postor. Hubo clubes que ofrecieron hasta 60 millones de euros", dijo el jueves el abogado de DIS, Paulo Nasser, en una rueda de prensa en Barcelona. Sin embargo, la entidad catalana aseguró tras la polémica despertada en su día que la cifra del traspaso fue de 57,1 millones de euros, de los cuales 40 millones se pagaron a la familia de Neymar. Por consiguiente, lo que DIS recibió fue el 40% de los 17,1 millones restantes que se pagaron al Santos.
El tribunal de Barcelona donde se llevará a cabo el juicio dijo que Neymar tendrá que comparecer en persona el lunes para el primer día, pero no está claro si se le pedirá que se quede durante toda la audiencia, que podría durar dos semanas.
Neymar, sus padres, Rosell y Bartomeu iniciarán su testimonio el próximo viernes.