Que Mbappé y Haaland son dos talentos generacionales nadie lo pone en duda. Sin embargo, en este tipo de duelos de colosos los aficionados siempre tienen la necesidad de poner a uno por delante del otro. Cada persona tiene su opinión y mil motivos para elegir al que piensa que va por delante en esa subjetiva carrera.
Además, ahora que el enfrentamiento más grande de todos los tiempos, que tuvo como protagonistas a Cristiano Ronaldo (38) y Messi (35), ha concluido con la marcha del luso a Arabia Saudí, los fanáticos del deporte rey han quedado huérfanos y se esmeran en buscar la próxima gran batalla épica de nuestro tiempo.
Igual que sucedió con el portugués y el argentino, estas jóvenes estrellas nos están brindando un duelo caracterizado por un Mbappé que destaca por todo lo que aporta y genera para el Paris Saint-Germain más allá de los goles, y un Haaland que es un auténtico depredador de área, un revienta récords de época.
El noruego, como todo jugador especial, ni siquiera necesitó adaptarse al fútbol inglés para empezar a ofrecer su mejor nivel. Eso se ha traducido en 32 goles en 28 partidos con la camiseta del City. Esto confirma que era la guinda que les faltaba a los ‘sky blue’ para cerrar un plantilla de ensueño capaz de pelear por llevar la primera Copa de Europa a las vitrinas del club.
En el otro lado de la mesa está todo un campeón del mundo con Francia. Kylian es un tipo de futbolista completamente diferente. Canaliza por sus botas una buena parte del juego ofensivo del PSG. Hace que su equipo funcione y, además de con su potencia, cuenta con una habilidad impropia de un tipo de su tamaño. Aún así, no descuida la faceta goleadora y acumula 20 dianas en 26 choques con su club.
Principio y fin
Como se pudo ver contra el Bayern de Múnich en la ida de los octavos de final de Champions, en Mbappé comienza todo para la escuadra dirigida por Christophe Galtier (56). Sin él estaban perdidos a merced de los alemanes y, cuando saltó al campo, seguramente sin estar físicamente al 100%, puso el mundo a sus pies y solo el VAR pudo evitar que rescatase un resultado más positivo que la derrota.
Para Pep Guardiola (52), Erling Braut Haaland no es más que el elemento final de un engranaje perfectamente engrasado. Cumple la función de hacer los goles y el resto se ocupan de que la maquinaria funcione. Por eso el Manchester City sufre mucho menos cuando él no está que cuando el PSG carece de su líder.
El debate será difícil de resolver, porque cada uno tiene sus virtudes. Lo mejor es disfrutar de ellos sin cuestionarse cuál es el mejor. Puestos a decidirse por uno, tal vez Mbappé sea más útil en un equipo sin tanta construcción de juego como los mancunianos. Por su peso dentro de la plantilla tal vez esté un paso por delante. Sin embargo, el ‘9’ citizen no deja de estar a punto de romper el récord goleador de una temporada en su primer año en la Premier League.