Muchos lo interpretaron como una especie de final anticipada, y no es para menos, ya que se enfrentaban la dupla más en forma del circuito y la que lo ha dominado durante buena parte del 2023. Esta última, formada por Paula Josemaría y Ari Sánchez, aspiraba a frenar la fulgurante racha de Bea González y Delfi Brea (campeonas en Suecia y México, del WPT, y en Milán, del Premier, tres torneos que se han disputado a lo largo del mes de noviembre).

Josemaría y Sánchez tenían por delante un reto mayúsculo, aunque contaban con credenciales de sobra para pensar en un desenlace positivo. El Palau Sant Jordi, abarrotado y con ganas de marcha, disfrutó de un partido más que emocionante. La manga inaugural, de hecho, se resolvió mediante el tiebreak (7-6), una importante pista de cara a lo que se avecinaba a partir del siguiente set, que cayó en la dirección contraria (3-6).

El tercer y último episodio prometía una pelea de lo más intensa. González y Brea, sin embargo, se mostraron mucho más sólidas. Tanto es así que arrasaron en los primeros juegos y establecieron un más que favorable 4-1, lo que obligaba a sus rivales a apelar a la épica. La magia de otras ocasiones no llegó y, ya mermadas físicamente, acabaron sucumbieron por un claro 6-2. El adiós al Master Final de Barcelona era un hecho.

Las Superpibas tendrán que superar un escollo más: Aranza Osoro y Jessica Castelló. Aunque buena parte de los focos apuntaban a un lado del cuadro, ni mucho menos hay que olvidar a una pareja que igualmente aspira a triunfar en la Ciudad Condal. Y están en el choque dominical por méritos propios: dejaron por el camino ni más ni menos que a Marta Ortega y Gemma Triay, quienes cayeron este sábado (1-6, 6-2 y 6-4) pese a partir como favoritas.