El lunes por la noche, al final de un partido de la Super Lig, el árbitro Halil Umut Meler recibió un puñetazo en la cara y luego una patada mientras estaba tendido en el campo. El miércoles por la mañana, imágenes de televisión mostraron cómo salía del hospital de Ankara y entraba en una furgoneta negra.

Mehmet Yorubulut, médico jefe del hospital Acibadem, ha declarado que la fractura que sufrió en la cabeza se curará con el tiempo: "La hemorragia del ojo izquierdo de Meler se ha detenido casi por completo ", ha añadido.

El presidente del club Ankaragucu, Faruk Koca, fue detenido el martes por agredir a Meler al final del partido. Meler había declarado anteriormente a la policía que Koca también le había amenazado de muerte durante el incidente.

La violencia se produjo al final del partido en casa del Ankaragucu contra el Rizespor. Koca entró en el campo y golpeó a Meler cuando sonó el pitido final después de que el Rizespor marcara el gol del empate en el minuto 97 del partido (1-1).

La federación declaró que el Ankaragucu, su presidente, los directivos del club y todos los culpables de agredir al árbitro serán "castigados en los términos más enérgicos posibles". También suspendió todos los partidos.