Una acción trepidante y espectacular por banda derecha, con una gran combinación entre Felipe Anderson y Lazzari acabó siendo rematada por Zaccagni que, con un taconazo que recordó al mejor Crespo. El gol del ex adelantó al Lazio en casa del Verona en el minuto 23 de la primera parte. De esta forma, el equipo de Maurizio Sarri se hizo la ilusión de poder dominar a los gialloblu en casa, mostrando su habitual dominio pero también lciertos agujeros en defensa.

La gran capacidad para mantener la posesión del balón por parte de Immobile y sus compañeros no se vio materializada por el cierre de filas en los momentos difíciles, esos pocos en los que el Verona intentó amenazar la portería de Provedel, sólo para tener éxito y aumentar el resentimiento de los laziales, que se han visto relegados diez puntos esta temporada.

Lamento biancoceleste

De hecho, fue en la segunda parte cuando los locales intentaron cambiar las tornas, aportando más dinamismo al campo e intentando apretar a la Lazio en los espacios que dejaba debido a su imparable deseo de seguir proponiendo juego de ataque. Y el autor del empate fue el francés Henry, que había entrado unos minutos antes y encontró el golpe justo de gol en el minuto 70, tras un despeje no muy ortodoxo de Provedel.

Los lamentos aumentaron para el Lazio, que vio cómo el Verona atacaba en los dos minutos siguientes, pero sin éxito a pesar de su considerable afán. Era hora de recuperar la compostura, de hacer algunos cambios, y los de Sarri recuperaron el control del balón. Castellanos, que entró por Immobile, calentó los guantes de Montipò antes de que a Casale le anularan su primer gol en la Serie A, también como ex jugador, tras una revisión de Var.

En la última, tras la expulsión de Duda, Luis Alberto y Vecino lo intentaron, pero no encontraron portería con un disparo desde fuera del área y un remate a bocajarro, respectivamente. El resultado final de 1-1 fue de celebración para los locales y de lamento para los visitantes, que volvieron a desaprovechar otra oportunidad.