Al ser el único partido de esta tarde en las cinco ligas tradicionales de Europa, los ojos del continente estaban puestos en Udine, donde un comienzo tibio probablemente habría despistado hasta al más devoto de los aficionados al fútbol.
Aunque la ventaja de 14 puntos en el liderato de la Serie A antes de la jornada significa que el Inter ya tiene prácticamente asegurado el título, había un aliciente adicional, pues sabía que la victoria mantendría vivo el sueño de ganar el título contra su rival de la ciudad, el Milan, dentro de poco menos de dos semanas.
El turco Hakan Calhanoglu estuvo a punto de adelantar a los suyos a la media hora de juego, pero Maduka Okoye repelió su potente disparo.
Esa parada tuvo aún mayor importancia 10 minutos más tarde, cuando los anfitriones se adelantaron en circunstancias cómicas. El centro desviado de Lazar Samardzic parecía entrar sin peligro en el área, pero un fallo de comunicación entre Yann Sommer y Denzel Dumfries -ambos dejaron pasar el balón- hizo que el balón se introdujera en la meta interista.
A los pocos minutos de la reanudación, el Inter pensó que se había metido de nuevo en el partido, cuando Carlos Augusto remató a la red tras una jugada en el área, pero el VAR anuló el tanto por fuera de juego.
El gol fue sólo un respiro temporal para los locales, que se vinieron abajo poco después, cuando Okoye salió a por un balón al que no iba a llegar y golpeó a Marcus Thuram. El guardameta del Udinese ya había hecho una buena parada ante Calhanoglu, pero esta vez no tuvo ninguna oportunidad y el turco colocó la pena máxima en la escuadra.
El Inter se fue a por la victoria, pero el disparo desviado de Frattesi fue en cierto modo sintomático de las dificultades a las que se enfrentaba en el último tercio.
Pero en el minuto 95, encontró el premio. Frattesi se redimió apareciendo en el área para rematar a gol después de que el disparo inicial de Lautaro Martínez se estrellase en el poste, desatando el júbilo en el banquillo interista y en la grada visitante, dejando al Udinese desconsolado.
Jugador Flashscore del partido: Hakan Calhanoglu (Inter de Milán)