Cuando el Balón de Oro de 2022 sucumbió a la tentación de los petrodólares, y en un país musulmán, y decidió dejar el Real Madrid, no esperaba que apenas seis meses después estaría más que arrepentido.
Por unas cosas o por otras, Benzema no ha estado al nivel que se esperaba de él. Falta de aclimatación, de actitud o de motivación por el poco nivel deportivo de las competiciones, la realidad es que no es feliz en el Al-Ittihad y sueña con un regreso a la máxima competición.
Días antes de la última jornada de la Pro League antes del parón por la Copa de Asia ya se había ausentado de los entrenamientos, marchándose incluso de Yeda. Luego se dijo, aunque no por fuentes oficiales, que tenía autorización del club para hacerlo. Coincidió con furibundas críticas recibidas tras la derrota ante el Al-Nassr de Cristiano Ronaldo. Incluso borró sus perfiles en redes sociales.
Se esperaba que todo volviera a la normalidad en unos días, pero la realidad es que, tras las vacaciones, no se presentó a la pretemporada con el argumento de quedarse atrapado en las islas Mauricio por un ciclón.
El Arsenal, a por él
Con toda esta situación, queda claro que Benzema, que ya había provocado la salida de Nuno como entrenador, y que tampoco parece tener sintonía con Marcelo Gallardo, su sustituto, no está nada cómodo.
Algo que el Arsenal quiere aprovechar. Los de Mikel Arteta necesitan gol, buscan delantero centro y qué mejor candidato que Karim, Balón de Oro de 2022 y que la temporada pasada aún marcó 27 goles en 39 partidos oficiales con el Real Madrid.
En ésta, a pesar de todo, lleva 15 dianas en 24 encuentros. Aunque el nivel, lógicamente, es muy inferior.
