De inmediato, los paramédicos se lanzaron a ayudarle, al tiempo que Rob Edwards, su entrenador, saltaba al césped para alejar a los futbolistas mientras su compañero recibía la atención sanitaria.

Tras unos instantes en los que la reacción de todos sobre el terreno de juego y en la grada era de angustia, con caras desencajadas y manos en la cabeza, el árbitro envió a los miembros de ambos equipos a los vestuarios. 

Corría el minuto 65 del encuentro cuando ocurrió el incidente y el encuentro iba 1-1. Poco después, tras las conversaciones entre los entrenadores y el árbitro, Simon Hooper, se tomó la decisión de suspender el partido.

A continuación, un lloroso Edwards dio una emotiva vuelta al campo con los jugadores de ambos equipos aplaudiendo al público, mientras todos los aficionados coreaban continuamente el nombre de Lockyer.

Parte médico oficial

Según el exfutbolista y ahora presentador Gary Lineker, confirmado después por el propio club, Lockyer, capitán del Luton, estaba alerta y receptivo y fue trasladado al hospital.

"Nuestro personal médico ha confirmado que el capitán sufrió un paro cardíaco en el campo, pero ya estaba respondiendo cuando lo sacaron en camilla. Recibió tratamiento adicional dentro del estadio, por lo que una vez más damos las gracias a los equipos médicos de ambas partes", ha comunicado el Luton. 

El jugador galés de 29 años ya se había sometido a una operación de corazón en el pasado mes de junio para solucionar un problema que le hizo desplomarse durante la victoria del Luton en la final de los play-off en Wembley.

"Tom fue trasladado al hospital, donde podemos asegurar a sus seguidores que está estable y que actualmente se está sometiendo a más pruebas con su familia junto a su cama", indicó la entidad inglesa.