José Lana llegó a la Real Federación Española de Fútbol a golpe de currículo, como antaño, cuando entrenaba en Canadá, un país en el cual aprendió "una forma diferente" de entender el deporte que tanto ama y la vida misma. Se enteró de que había una vacante y decidió probar suerte. Y funcionó, claro. Desde entonces sólo ha dado pasos hacia adelante, aunque él mismo reconoce durante la conversación que ni mucho menos lo necesitaba.
Fue en 2022 cuando empezó a hacerse cargo simultáneamente de la sub-15 y la sub-16, categorías que entonces dirigía David Gordo -pasó por este medio días atrás-. Cuando Luis de la Fuente dio el salto a la absoluta por la salida de Luis Enrique, el efecto dominó se activó por completo: Santi Denia se aupó a la Rojita y el asturiano puso rumbo a la sub-18 y a la sub-19. Ahora, y hasta que acabe el campeonato, baja de nuevo un peldaño por su gran conocimiento de la plantilla. Hernán Pérez, ex del Club Deportivo Lugo, se incorporó a la sub-17 en el verano del presente año.
Comida española en Indonesia
Empate contra Uzbekistán para pasar como primeros de grupo, aunque sin pleno de puntos. ¿Qué sensaciones tiene?
Siempre digo que nuestro objetivo es ser mejor en cada partido tanto individual como colectivamente. Hicimos muchas cosas bien y pocas mal, pero estas últimas se repitieron muchas veces. La sensación que deja el partido no es buena por eso.
¿Qué debe mejorar el equipo y qué debe consolidar de cara a las rondas finales?
Tenemos que tener muy claro los aspectos individuales y colectivos de los cuales depende nuestro rendimiento. Lo estamos entrenando desde el primer día, aunque a veces hay condicionantes: el nivel de los rivales, el calor que hace... Cuando llegamos a situaciones en las que estamos fatigados, pues nos cuesta mantener el rendimiento.
¿Cómo está siendo el día a día en Indonesia y cómo son las instalaciones?
La verdad es que estamos muy bien. Todos los miembros del staff, cada uno en su departamento, están haciendo un trabajo espectacular para que los técnicos y los jugadores estemos pendientes de lo nuestro. El hotel es muy cómodo, los campos de entrenamiento están bien y todo está muy cerca. Tenemos a nuestro cocinero aquí, lo cual es un lujo, porque podemos comer todos los días como se come en España. Estamos encantados, aunque es verdad que en los entrenamientos y en los partidos hace muchísimo calor, pero eso ya no lo podemos controlar.
"Mandé mi currículo sin ninguna esperanza"
El debut fue contra Canadá. ¿Qué lecciones se llevó de su paso por dicho país?, ¿conocía a algún jugador?
No porque estuve con chavales que eran más mayores. Y aprendí una forma diferente de entender el fútbol y la vida. La zona que yo conocí era muy buena.
¿Cómo fue su llegada a la RFEF?
Estaba en Canadá y me informaron de que estaban buscando entrenadores que pudiesen desempeñar varias funciones porque el cuerpo técnico era muy reducido. Mandé mi currículo sin ninguna esperanza, ¿sabes? Aparecía que había trabajado como primer entrenador, segundo entrenador, preparador físico, director de cantera, miembro de cuerpo técnico, haciendo bases de datos de jugadores... y, bueno, les encajó el perfil y me llamaron para hacer una entrevista.
Esa versión polivalente fue clave, ¿no?
Sí, sí. Creo que era el principal motivo. De hecho, en mi primera concentración oficial con la selección, que fue la sub-19 de Santi Denia, yo fui como preparador físico y como analista.
Feliz en categorías inferiores
Dirige a la sub-18 y a la sub-19, ahora está con la sub-17... No se aburre, desde luego
No, no tenemos tiempo. Da la casualidad de que ahora se está jugando también la primera fase de clasificación para el Europeo Sub-19 y ahí está con ellos David Gordo (volvió en mayo de este año), que lo está haciendo de forma sensacional. El tema es que aquí nosotros tenemos una línea de trabajo marcada, independientemente de quién sea el seleccionador, y lo puede cumplir cualquiera. Me alegro muchísimo de que pueda estar él con ellos. Ganaron por 5-0 el primer partido (contra Moldavia), pero no es sólo la victoria, sino la manera en la que lo consiguieron.
Con tantas selecciones distintas, ¿se ha confundido de jugador alguna vez? Le pasaba a Setién en el Villarreal...
No, no. No nos pasa porque es lo que tenemos en la cabeza todos los días y también hay un grupo de trabajo muy grande. Contamos con un departamento de captación que hace un trabajo increíble porque a partir de la gestión de sus dos coordinadores, a quienes tenemos aquí, nos mandan todos los informes escritos y de vídeo. Estamos día a día pendientes de esas cosas, así que no nos confundimos.
Su carrera está claramente ligada al fútbol de formación, ¿se ve en una selección o equipo sénior?
No tengo ninguna aspiración. Llevo 24 años trabajando ya, sé de dónde vengo, lo que hay por ahí y estoy encantadísimo por poder desempeñar esta labor. Disfruto cada día con mis compañeros en el despacho y en cada entrenamiento que hacemos. Yo estaría encantado de estar en la sub-15 toda la vida.
"Que se olviden del contexto"
¿Cómo se gestiona la presión y la ambición por ganar un Mundial con chavales que están aún en edad de formación?
Desde que empiezan a venir a los 14 años, nosotros les definimos cuáles son los aspectos determinantes a nivel individual que, según creemos, deben desarrollar para poder llegar a la absoluta. Nos centramos en que cada día sean un poco mejores en dar rendimiento. Y aquí no estamos haciendo una cosa diferente. Estamos intentando que se olviden del contexto, de quiénes les están viendo por la televisión y de lo que significa jugar un Mundial; que estén pendientes nada más de que en la siguiente acción puedan dar mejor rendimiento que en la anterior. Estamos muy contentos con los chavales.
Teniendo en cuenta que el objetivo es que los jugadores lleguen a la absoluta, ¿hasta qué punto es importante ganar?
Nosotros vamos a intentar hacerlo en cada partido, pero el objetivo es que tengan opciones de jugar en la absoluta, que estén lo mejor formados posible y que conozcan de qué va a depender que lleguen o no. Es importante que hagan hincapié en mejorar esos aspectos cada día tanto con sus clubes como con nosotros, siempre y cuando en estos no les digan cosas diferentes, ya que entonces tienen que hacerles caso. Siempre aparece esa duda entre el fútbol formativo y el profesional. Nos centramos en que mejoren y no pensamos en el resultado porque va a llegar el día, cuando estén en el primer equipo de sus clubes, en que los van a valorar en función de si están o no preparados. Da igual que hayas metido 150 goles en cadete o ganado todos los títulos posibles.
Entre Yamal y Guiu
Un jugador que ha quemado etapas de forma precoz ha sido Lamine Yamal. ¿Le hubiese gustado contar con él?
En las condiciones en las que no está aquí, no me habría gustado contar con él. Si no está aquí es porque está en la absoluta. Cuanto antes lleguen, mejor. Eso les va a permitir vivir más fases de clasificación, más Eurocopas y más Mundiales, además de formarse mejor contra los rivales más potentes, y entendemos que eso es lo que nos va a dar resultados en la absoluta.
Entiende que está mejor con Luis de la Fuente que en Indonesia.
Yo creo que un futbolista, en etapa formativa, tiene que estar al nivel más alto que le permita seguir mejorando. Tampoco se trata de quemar etapas y meterles en categorías donde se vean superados, pero Lamine lleva pegando saltos grandes desde hace tiempo y se adapta muy rápido a lo que se le presenta. Él empieza como uno más y en un mes pega una evolución grandísima.
Y otro jugador que está viviendo algo parecido es Marc Guiu. ¿Qué consejos le da?
Ahí está el papel de la familia, de su representante y de su club para intentar guiarle en este camino ante las cosas que se le están presentando. Nosotros tenemos aquí psicólogos y tutores académicos que están pendientes de los chavales por si surgiese alguna necesidad, pero no detecto que haya que hacer nada especial con él. Sigue siendo el mismo chaval que era antes de que le pasase todo esto. Es un crío que da todo en cada partido y en cada entrenamiento. La relación con los miembros del staff y con sus compañeros no puede ser mejor. Es un chaval que está muy centrado, y es muy educado y muy responsable.
Por último, ¿tiene plan para el día 2 de diciembre (fecha de la final?
Pues no. Iremos día a día e intentaremos hacer las cosas lo mejor posible. No nos estresamos por el futuro. Se lo decimos a ellos también, que vivan despacio, que no se aceleren y que disfruten de la experiencia. Vivirán partidos importantísimos en sus vidas, de Champions, de selección absoluta o determinantes para ganar una Liga, pero este Mundial Sub-17 en concreto no lo volverán a vivir nunca más, así que les pedimos que estén centrados día a día.
Gracias por haber atendido la llamada de Flashscore.
Nada, muchas gracias a ti. Aquí estamos para cuando nos necesites o quieras volver a hablar.