Con una Noruega muy mermada por las ausencias de sus estrellas, se presentaba un partido muy táctico, con poco lugar para la improvisación. El último golpe para las nórdicas llegó justo después de los himnos nacionales, cuando Ada Hegerberg enfiló el túnel de vestuarios para no volver al césped.
La ausencia de una de las mejores goleadoras del planeta cambia cualquier plan y se vio desde el minuto uno. La dirección de las operaciones recayó claramente sobre Suiza, que, aunque tenía la posesión del balón, no lograba materializarla en ocasiones de peligro.
De hecho, quienes más inquietaron en el primer acto la meta rival fueron las mujeres dirigidas por Hege Riise. Sobre el minuto 24, Sophie Haug conectó un potente cabezazo al que Gaelle Thalmann, guardameta del Real Betis, debió responder con reflejos felinos para evitar el 0-1.
Y es que el juego aéreo se convirtió en la mejor baza de Noruega. Ahí contaban con una ventaja diferencial sobre las centroeuropeas y la explotaban cada vez que tenían ocasión. Por esa vía se acercaron, aprovechando un córner, en el inició de la segunda mitad. Nuevamente tuvo que actuar la portera suiza.
La acción cambió el chip de ambos combinados y las de Hege Riise comenzaron a gozar de un mayor volumen de llegadas mientras que Thalmann se erigía como salvadora. El asedio fue en aumento, lo que transformó los últimos minutos en un infierno para el combinado dirigido por la alemana Inka Grings.
Suiza defendía con uñas y dientes un empate que le confería el liderato del Grupo A en solitario, después de la derrota de Nueva Zelanda contra Filipinas, mientras Noruega buscaba con ahínco su primeros tres puntos de esta Copa del Mundo. Finalmente la resistencia helvética surtió efecto y el 0-0 no se movió del marcador.
Jugadora Flashscore del partido: Gaelle Thalmann.
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