España llega a la última jornada de la fase de grupos en una situación ideal. Si le hubieran preguntado a cualquiera de las futbolistas si firmaba estar líder con siete goles a favor y ninguno en contra antes de medirse a Japón, con ventaja sobre las niponas en caso de empate, seguro que cualquiera de ellas hubiese escrito su nombre sin pensarlo un segundo.
El mediocre devenir de Noruega -derrota contra Nueva Zelanda, reparto de puntos frente a Suiza y triunfo ante Filipinas- provoca que la coyuntura sea más compleja de lo que podía esperarse. La que se clasifique para octavos como primera se enfrentará a una selección a la que le ha costado arrancar y con algunos problemas internos, pero recuperada anímicamente tras la paliza de este domingo (6-0)tras la paliza de este domingo (6-0).
Un oponente de altura
Las asiáticas ocupan la undécima plaza en el ranking FIFA y tienen argumentos de sobra para llegar al menos a los cuartos de final, por lo que es un fantástico test para comprobar cómo responde la Roja, en partido oficial, cuando tiene que medirse a un plantel de mayor nivel. Golear a Costa Rica y Zambia es algo que podía entrar dentro de lo esperado y caer con malas sensaciones este lunes, tal y como le pasó a Luis Enrique y compañía en Catar, generaría unas dudas que ahora no existen.
En un grupo bastante engrasado, las campeonas del mundo en 2011 cuentan con jugadoras que militan en clubes potentes del viejo continente: Yui Hasegawa (Manchester City), Saki Kumagai (Bayern de Múnich) o Fuka Nagano (Liverpool). Además, hay otras como Jun Endo (Angel City) o Ayaka Yamashita (Inac Kobe Leonesa) que acostumbran a destacar cuando actúan como internacionales.
Tal y como expusieron Vilda y las futbolistas que comparecieron en rueda de prensa (Teresa Abelleira, Irene Guerrero y Esther González), se esperan un choque más complicado que los dos anteriores y, por supuesto, un guion radicalmente diferente. La lucha por la posesión estará entre las principales batallas durante la hora y media, descuentos aparte, que durará el duelo.
Las dudas del once
Ivana Andrés, baja en el entrenamiento del sábado debido a unas molestias, parece tener pocas opciones de ser de la partida y eso quiere decir que, salvo sorpresa, habrá al menos un cambio en defensa (entraría Rocío Gálvez). Irene Paredes parece fija y la lógica sitúa a Olga Carmona y Ona Batlle como laterales -a excepción de si el técnico opta por la revolución-. Misa Rodríguez, una vez más bajo palos.
Teresa Abelleira ha hecho méritos para repetir y tanto Alexia Putellas como Aitana Bonmatí, sustituidas durante la segunda mitad ante las africanas, tienen todas las papeletas para mantenerse. Arriba, Esther González apunta a ocupar la punta de lanza junto a Salma Paralluelo y Eva Navarro, que sustituiría a Mariona Caldentey. La veterana Jenni Hermoso descansaría tras haber completado los dos anteriores compromisos y Athenea del Castillo, algo tocada pero disponible, se quedaría también en el banquillo.