Dinamarca arrancó la contienda imponiendo un ritmo alto que pilló por sorpresa a las coanfitrionas. Australia no consiguió sacudirse la presión durante buena parte del primer acto y las europeas gozaron de buenas ocasiones, aunque sin suerte a la hora de batir a Mackenzie Arnold.

Las Matildas supieron aguantar el empuje nórdico y poco a poco fueron protagonizando acercamientos al área rival. La posesión se iba equilibrando y a las jugadoras de Lars Sondergaard se les hacía cuesta arriba el encuentro tras el esfuerzo inicial.

Con la intensificación de las acometidas aussies, la inquietud reinaba cada vez más en las filas danesas. Finalmente, con un contragolpe lanzado a la perfección, las australianas anotaron el 1-0. La encargada de culminar la vertiginosa jugada fue la delantera Caitlin Foord, que definió por raso para batir a la meta Lene Christensen.

Con ventaja mínima de las locales se alcanzó el descanso. A Dinamarca le tocaba recomponerse del mazazo pese a haber cuajado un buen primer tiempo. El cometido no resultó sencillo para el combinado del viejo continente, puesto que su oponente ganó en solidez gracias al gol anotado sobre la media hora de juego.

En su afán por igualar el marcador, la selección nórdica descuidó ligeramente la faceta defensiva. Las Matildas aprovecharon las debilidades y sentenciaron el choque con el segundo tanto de la noche en el Estadio Australia. El 2-0 vino precedido por una más que notable acción colectiva que acabó con Emily van Egmond cediendo con templanza a Hayley Raso, nueva jugadora del Real Madrid, que definió con mucha calma.

Muy cerca estaba el objetivo de los cuartos de final del Mundial para las coanfitrionas junto a Nueva Zelanda. Solo necesitaron plantarse bien en defensa y el resto llegó solo. Dinamarca no supo reponerse del segundo impacto y cedió sin presentar mayor oposición en lo que restaba hasta el final.

Jugadora Flashscore del partido: Caitlin Foord

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