Hubo un tiempo en el que el destino de Óscar Estupiñán parecía dirigirse a España. El Valladolid, en Segunda, y el ascendido Granada se interesaron por el colombiano, internacional hace un año tras sus buenas actuaciones con el Hull City. Finalmente, en los últimos instantes del mercado, el delantero formado en el Once Caldas puso rumbo a Lorena.
"Es un futbolista de área, es decir, un jugador con una cabeza muy fuerte y una presencia atlética", explicó el director deportivo Pierre Dréossi en la presentación oficial. "Es lo que buscábamos nosotros también. Es un jugador que hemos seguido".
Un estilo diferente al de Mikautadze
Para el delantero zurdo, la tarea de sustituir a George Mikautadze, máximo goleador y mejor jugador de la Ligue 2 la temporada pasada, que se marchó al Ajax tras marcar dos goles en agosto, promete ser difícil. "Soy un delantero que va bien al área y es bueno de cabeza. También ayudo a mis compañeros en defensa cuando presionan. Sustituir a Mikautadze es una presión que he podido soportar en mis anteriores clubes, porque ya he tenido mucha responsabilidad como delantero", dijo Estupiñan. El georgiano era capaz de ser un líder técnico sobre el terreno de juego. También es un cambio de registro para 'Les Messins'.
9 puro, representa el futuro próximo del FC Metz , que ha obtenido su cesión por una temporada con una opción de compra de entre 5 y 6 millones de euros. Estupiñán no es un desconocido en el fútbol europeo, ya que ha jugado en el Vitoria Guimaraes en dos ocasiones (2017-2019 y 2020-2022) y en el Denizlispor (2019-2020). Su última etapa en Portugal fue un éxito, con 66 partidos de liga, 24 goles y 11 asistencias en dos años. Después fichó por el Hull City, de la Championship, donde cuajó una temporada respetable, con 13 goles y dos asistencias en 35 partidos. Fue suficiente para convencer a Héctor Cárdenas, el seleccionador en aquel momento, de que lo convocara para la selección nacional en septiembre de 2022.
Durante la ventana de transferencias de invierno, el entrenador de los Tigres , Liam Rosenior, declaró intransferible al delantero, aunque el Nottingham Forest estaba siguiendo al colombiano. Entre finales de diciembre y mediados de enero, Estupiñán encadenó una racha de 4 goles en 4 partidos y 8 puntos para su equipo. Luego, poco a poco, su éxito disminuyó: un solo gol el 11 de marzo contra el Coventry, contra el que había marcado un triplete en la ida. Una última titularidad el fin de semana siguiente contra el Reading y luego nada o casi nada: 8 veces fuera de la convocatoria y 4 titularidades pusieron fin a su temporada. En agosto, la dinámica fue la misma, con sólo 72 minutos repartidos en 4 partidos y una titularidad en la Carabao Cup. El principal motivo de esta pérdida de protagonismo fue un tobillo que requirió una inyección a finales de marzo, según su ex entrenador, un problema que Estupiñán arrastra desde hace varias temporadas. El cambio de uno a dos puntas no le ayudó en nada a recuperar su sitio y, al final, prefirió marcharse de Inglaterra.
Para el FC Metz, la cuestión ahora es si el cafetero puede recuperar su antigua forma y si el traje le queda demasiado grande. En el amistoso del martes contra el Dudelange, marcó dos goles (4-1). Un buen comienzo. Su nuevo equipo necesita un goleador fiable y constante para sumar puntos y acercarse con tranquilidad a la fatídica barrera de los 42 puntos. Más que el número de goles, lo importante será marcar cuando haga falta. Empezar contra el RC Lens este sábado por la noche (21:00 horas) sería una buena manera de introducirse en la Ligue 1.