Un valor añadido que ha puesto al alemán de origen turco en el podio de mediocampistas más completos del universo futbolístico. Y que hace aún más atractiva su incorporación a un Barcelona que tiene el mismo estilo que el club que deja, un Manchester City que echará de menos su huella y aportación. 

Sin ir más lejos, desde que Gündogan llegó a Inglaterra en 2016 procedente del Borussia Dortmund, donde coincidió con Lewandowski, no ha hecho más que aumentar sus cifras realizadoras. Hasta el punto de que ha anotado 60 goles entre todas las competiciones que ha jugado, el tercer centrocampista más goleador en las islas, igualado con Phil Foden, a sólo cuatro de Bruno Fernandes -pero con 25 de penalti por cuatro del germano- y a 20 de su excompañero Kevin de Bruyne, autor de 80 goles pero que jugaba en posiciones más avanzadas. 

En sus primeros tiempos como profesional, sumó 15 dianas en 157 encuentros. Fue con Guardiola cuando se transformó en un arma letal para el enemigo, llegando desde atrás de manera sorpresiva para ir anotando tantos, muchos de los cuales han sido decisivos para el histórico triplete del City. 

Habrá que ver cómo se adapta a un nuevo medio campo, si dispone de tanta libertad con Xavi, y con compañeros como De Jong, Pedri, Gavi o Kessié, entre otros.