Ronaldo se negó a subirse a la báscula, lo que molestó a Fabio Capello, que pidió la salida del delantero del Real Madrid. 

"Hablé con el presidente sobre Ronaldo. Tenía que pesarlo. Pesaba 94 kilos. Le pregunté a Ronaldo cuánto pesaba cuando ganó el Mundial, me dijo que 84 kilos, y le respondí que con 94 kilos no podía jugar. No adelgazó", dice Capello.

Las pocas oportunidades que recibió Ronaldo hicieron que decidiera fichar por el AC Milan. El entonces presidente del club italiano, Silvio Berlusconi, llegó a ponerse en contacto con su compatriota Capello, que no veía con buenos ojos el fichaje, aunque sabía que se libraría del delantero. "El día de la llamada en la que sugerí no fichar, Ronaldo estaba en Milán", recuerda.

En el Milan, Ronaldo sufrió una grave lesión que convirtió al club de la Serie A en el último de su carrera en Europa. De ahí, el Fenómeno llegó al Corinthians, donde puso fin a su carrera en 2011.