Joel fue noticia hace unos meses, no por sus habilidades futbolísticas, que parecían prometedoras, sino por haber sido condenado en firme por un delito de violencia machista. 

Tuvo que cumplir 40 días de trabajo comunitario, pero tras ello siguió jugando en el equipo juvenil de la UD Las Palmas, adonde había llegado en edad alevín. 

A pesar de la polémica y de la presión social, el presidente de la entidad insular justificó la decisión de mantenerlo en el club por ayudar a su "reinserción", así como por sus cualidades futbolísticas. En la última temporada, anotó 11 goles en los 22 partidos que disputó con el División de Honor. 

Números que le premiaron con un ascenso a la primera plantilla en esta pretemporada. Sin embargo, después de que se incorporase el pasado 3 de junio, el técnico, García Pimienta, decidió que no viajase con el resto del equipo a la estadía en Marbella, algo que se ha justificado desde el club canario "por decisión técnica". 

Pero este jueves ha sido la propia UD Las Palmas la que ha comunicado que "Joel Domínguez no seguirá perteneciendo a la Unión Deportiva Las Palmas tras comunicarle hoy el club su rescisión por motivos disciplinarios".