El Atlético de Madrid se desplazó al Nuevo Mirandilla en busca del empujón necesario para ganar confianza de cara a la necesaria remontada ante el Inter de Milán en la Liga de Campeones. Si el fútbol es un estado de ánimo, como expresó Jorge Valdano, ganar de forma convincente en Cádiz podía ser algo así como el gol del empate en la eliminatoria. Quizás era una lectura demasiado optimista, pero lo cierto es que los rojiblancos necesitaban este tipo de estímulos.
Y qué decir del conjunto anfitrión, que tenía la urgencia de poner fin a una racha pésima (la última victoria había tenido lugar el 1 de septiembre, hace más de medio año, contra el Villarreal). Entonces estaba al frente Sergio González, destituido en enero y reemplazado por Mauricio Pellegrino, y los amarillos sumaban ya un par de triunfos en sólo cuatro jornadas, situación radicalmente opuesta a la actual pese a este último resultado.
Antonia Fuentes y Maripaz Parra, dos de las socias más antiguas, realizaron el saque de honor en homenaje al Día Internacional de la Mujer "y al amor que han entregado" al club andaluz durante sus vidas. La emoción y el sentimentalismo marcaron una previa que a nivel deportivo se vio determinada por el estreno del sirio Aiham Ousou, inédito tras aterrizar en la Tacita de Plata al final del mercado de fichajes, y la ausencia del lesionado Antoine Griezmann.
Conan, un espectador
Los de la capital protagonizaron algunos acercamientos por las bandas en los compases iniciales, aunque nada que incomodara en exceso a los locales, que se hicieron fuertes en transiciones y se pusieron en ventaja gracias a un fantástico cabezazo de Juanmi Jiménez allá por el minuto 23. Robert Navarro, muy activo durante el envite, superó líneas antes de encontrar en la banda izquierda a Rubén Sobrino, quien asistió con precisión al ex del Real Betis.
El Atleti, que se libró de un posible penalti de Gabriel Paulista por mano en una jugada algo controvertida, necesitaba cambiar muchas cosas. Faltaban ideas, frescura y profundidad. En este contexto, Diego Pablo Simeone decidió hacer una triple modificación al descanso (Ángel Correa, Rodrigo Riquelme y Nahuel Molina ocuparon los puestos de Memphis Depay, Saúl Ñíguez y Rodrigo de Paul). Ni siquiera esta revolución funcionó.
Una dinámica desoladora
Una acción que se presentaba intrascendente, un envío largo hacia la posición de Juanmi, dio pie al segundo y definitivo tanto. El malagueño, muy pillo, molestó a Paulista mediante un toque ligero y batió a Oblak a través de un efectivo remate picado (63'). Los de Simeone, derrotados ante un rival que ya había olvidado cómo se ganaba, pudieron recortar distancias por medio de Llorente, que se desesperó al ver cómo Ledesma rechazaba su testarazo, y Morata, con la mirilla desviada.
El ahora cuarto clasificado no ha vencido en ninguna de sus últimas seis salidas, una racha muy preocupante que resulta casi incompatible con la posibilidad de lograr algún título. Antes de que llegara el pitido final, por cierto, hubo tiempo para ver la decimoquinta amonestación de Iván Alejo -cumplirá su tercer ciclo en Donosti-. Y eso que acababa de entrar al verde... algo que ya le ocurrió el pasado fin de semana.
Jugador Flashscore del partido: Juanmi Jiménez.
Las estadísticas del choque están disponibles en Flashscore.