Todo el mundo habla maravillas, y con razón, del juego del equipo revelación de LaLiga.
El toque de Aleix García, la verticalidad de Tsygankov, los goles de Dovbyk, el desborde de Savinho..., pero todo eso no sería posible sin la seguridad que ofrece bajo palos Gazzaniga.
El arquero argentino es el último defensor de su guarida, pero también el primer atacante, como ha demostrado ya en alguna ocasión montando rápidos contragolpes o sacando el balón jugado con los pies.
Con una trayectoria que le ha llevado a pasar por el Southampton, Tottenham, Rayo Vallecano, Elche y Fulham, Gazzaniga se ha consagrado en el Girona, con el que lleva ya 52 partidos en Primera. Esta temporada ha dejado la portería a cero en uno de cada tres partidos disputados.
Y ahora, su rendimiento y compromiso, y la confianza que en él tienen Míchel Sánchez, se han visto premiados con esta renovación de su contrato hasta 2027.
