Hace ya muchos años, décadas incluso, un tal Benito Floro, el técnico inventor del 'Queso Mecánico', como era conocido el Albacete, fue de los pioneros en introducir la figura del psicólogo en el mundo del fútbol.
Algunos lo tildaron de loco, y ni siquiera en el club manchego terminaron de entender la presencia de un ajeno al deporte como ayuda para el futbolista.
Ahora está muy presente en todos los deportes el cuidado de la salud mental, sometidos los jugadores a tanta presión, jugando ante miles de espectadores, con las redes sociales como hervidero anónimo de acosos e insultos varios. Hoy en día lo raro es no encontrar ese profesional de la psicología en el mundo del fútbol.
Una figura que ha recuperado para la causa Claudio Giráldez en sus primeras horas al frente del Celta. Se trata de Laura Centoira. Ella tratará con los jugadores e intentará ayudarles a superar sus miedos y a sacar lo mejor de sí mismos.
Junto a Centoira, el nuevo responsable del banquillo olívico tendrá a Róber Fernández como ayudante, a Nando como entrenador de porteros, además de dos preparadores físicos, Álex Andújar y Christian Fernández. El resto del grupo lo completan dos analistas: David Areal y el exinternacional español Borja Oubiña.