No hubo lluvia. Tampoco barro. Pero sí hubo intensidad, agresividad, tensión, piques, lesiones... hasta lágrimas. Y, por supuesto, goles. Aunque esto último, lo más importante, sólo lo puso el Athletic. Por eso se llevó el derbi.
San Mamés hervía en el inicio. Faltaban ocasiones, sobraba precipitación. Pero cualquiera bajaba de revoluciones a los 22 sobre el campo. Parecían calcados en sus estrategias, con la presión adelantada, con un ritmo endiablado, sin dejar pensar al rival. Hasta había duelos de velocidad pura entre Nico Williams y Odriozola. Acabaron, por desgracia para el donostiarra, muy pronto. A los 17 minutos se rompió el lateral, que se marchó llorando. No puede tener peor suerte desde su regreso.
BerenGOL
Desde ahí, el Athletic se fue encontrando mejor, llegando cada vez más a los dominios del debutante Marrero. Una insistencia que tuvo sus frutos a la media hora de encuentro. Yuri dobló a Nico, llegó a la línea de fondo, centró al área pequeña y llegó, previo toques en Zubeldia y el portero, a Berenguer para marcar a placer.
El Athletic no se conformó. No sabe hacerlo. Así que, con más espacios para el león Williams, llegó el segundo, firmado también por Berenguer tras fallidos intentos de Vesga y Guruzeta. Zubeldia negó los remates a los dos, pero ya no llegó a tapar al bigoleador.
Menos ritmo
Le interesaba dormir el partido a los de Valverde y así lo hicieron. Permitieron a la Real sacar el balón jugado desde atrás, esperándoles con las líneas más retrasadas, pero muy juntas, y siempre con la amenaza de las contras de Nico Williams.
Hasta que no llegaron los cambios, no fueron capaces los de Imanol de parecerse a sí mismos y generar cierto peligro ante Unai Simón. Primero fue Elustondo, después Magunazelaia. Y cuando parecía que ya estaba todo el pescado vendido, que los jóvenes iban a tener sus minutos de rodaje para futuros derbis, marcó Oyarzabal tras una acción embarrullada en la que unos no supieron despejar y otros, hasta llegar al capitán, rematar.
Era el minuto 89, pero ya no hubo opciones salvo para algún encontronazo entre Le Normand y Unai que no pasó a mayores. Victoria del Athletic, quinta consecutiva, que dormirá tercero y deja ya a nueve puntos a su eterno rival.
Jugador Flashscore del partido: Álex Berenguer (Athletic de Bilbao).