La Community Shield es la Supercopa de Inglaterra. Es decir, enfrenta al campeón de la Premier y al de la FA Cup. Por esa regla de tres, le tendrían que haber entregado el trofeo al Manchester City antes de jugarse pero, ante una situación así, el Arsenal, segundo en la Premier, se presentó como un invitado con todo el derecho a llevarse el primer gran trofeo de la temporada.
Un City – Arsenal es un gran prólogo para comenzar la temporada de las grandes competiciones. El tricampeón (Liga, Copa y Champions) frente al gran aspirante, el equipo que más dinero ha invertido para intentar destronar al rey. El estadio, Wembley, también propiciaba un marco adecuado, con una atmósfera ideal, para un estreno de tal calibre.
La primera parte fue de dominio citizen pero las mejores ocasiones fueron del Arsenal. El alemán Havertz, jugando de nueve por ausencia del lesionado Gabriel Jesús, tuvo dos grandes oportunidades que atajó Stefan Ortega, el portero al que Guardiola concede partidos fuera de la Premier y la Champions. Declan Rice, el hombre de los 121 millones de euros, también debutó pero su aportación dista mucho todavía de ser brillante.
En el minuto 63, Guardiola quitó a un desdibujado Haaland y en su lugar entró el joven Palmer. Trece minutos más tarde, el prometedor centrocampista inglés controló un balón, tras una conducción de Foden que también tocó De Bruyne, y, desde la frontal del área, le pegó con la zurda de manera majestuosa. Ramsdale nada pudo hacer por evitar el gol del City.
Los de Mánchester se animaron y Ramsdale salvó otros dos goles más de los campeones. Uno de Foden, que sacó con el pie en la línea de meta, y otro tras un gran cabezazo de Rodri, un jugador que no para de crecer futbolísticamente en Inglaterra.
El Arsenal intentó tímidamente igualar el partido pero ni Saka ni Martinelli ni Odegaard ni Havertz tuvieron su mejor día en una ocasión de oro para destronar al gran dominador del fútbol en Gran Bretaña. El City seguía en modo apisonadora y nadie dudaba que en las vitrinas del Ettihad tendrían que hacer hueco para otra copa.
En ese momento, con el árbitro a punto de pitar el final, un chut de Trossard pegó en Akanji, despistó a Ortega y llevó el choque a los penaltis. No hubo prórroga.
Desde los once metros, los de Londres estuvieron más finos. Odegaard, Trossard, Saka y Vieira marcaron para el Arsenal. De Bruyne y Rodri fallaron para el City. El primer título se va al Emirates. Mikel Arteta ya puede respirar un poco en sus duelos con Guardiola.
Jugador del partido: Cole Palmer