El triunfo del Atlético de Madrid en el derbi copero no podría explicarse sin el concurso de sus dos delanteros. Álvaro Morata aprovechó un fallo de Lunin en el minuto 57, tras otros dos en cadena de Camavinga y Rüdiger, para hacer un gol de puro oportunista. Y, Antoine Griezmann, que fue ovacionado antes del inicio del partido por haber batido el récord goleador de la entidad que ostentaba Luis Aragonés, fue el que sentenció el partido en la prórroga.
Aunque aún faltaba por ver el cuarto de Riquelme, la diana del francés, a los 10 minutos del primer tiempo del suplementario, fue fundamental en el devenir del encuentro. Tras una gran jugada personal por la banda derecha fruto de un mal pase de Vinicius y, casi sin ángulo, colocó su zurdazo en la escuadra de Lunin. El de Macon sólo ha conquistado un título como rojiblanco y tiene la presente Copa del Rey entre ceja y ceja.
Tanto Morata como Griezmann han superado ya sus registros goleadores del ejercicio anterior. Álvaro hizo 15 dianas entre todas las competiciones y Grizzy 16.