El Bayern se enfrentaba a una misión prácticamente imposible, casi como escalar el Everest en chanclas. Todos los presagios eran negativos. Un 3-0 en contra, un equipo soberbio enfrente, una grave pelea interna entre dos compañeros, un central con muchas dudas, por ser generoso en la definición, que cometió un error grosero en el Etihad (Upamecano), un entrenador adaptándose a un equipo eliminado de la Copa alemana y presionado en la Bundesliga,….Parecía no haber resquicio para la esperanza. Sin embargo, el Allianz Arena estaba lleno. El orgullo bávaro no permite rendirse a su equipo. El lema “Mia San Mia” (nosotros somos nosotros) sirve para recalcar el fuerte sentimiento de pertenencia de Baviera y, en cierta forma, su arrogancia, la manera de distinguirse de los demás.
Haaland da miedo
Los de Tuchel salieron al ataque, con dos puñales por las bandas (Coman por la derecha y Sané por la izquierda), Musiala como abastecedor de balones desde la mediapunta, Kimmich de organizador y lanzador y Choupo-Moting, volviendo de una lesión, para cazar lo que cayese en el área. El City, fiel a su estilo, intentaba la presión alta, la recuperación rápida y defenderse con la posesión del balón. El manual de cabecera de Guardiola. Arriba, el depredador vikingo, Erling Haaland, se bastaba para meter miedo a toda la defensa alemana. Bernardo Silva y Kevin De Bruyne, futbolistas de pie fino y calidad refinada, trataban de filtrar balones al goleador noruego.
En el minuto 16 llegó la primera ocasión clara para los locales. Balón con lazo incluido de Musiala a Sané al espacio, carrera del alemán y buena definición con la zurda pero excesivamente cruzada a la izquierda de la portería de Ederson. En la siguiente jugada Haaland se le escapó en carrera a Upamecano y el francés, al que nada le sale bien, vio la roja por una entrada siendo el último hombre. Le salvó de irse al vestuario que Haaland había arrancado la jugada en fuera de juego. Con muy poco, el 9 del City sembraba el pánico en el Allianz. Lleva el peligro en el ADN. Casi igual que Sané, que, de falta, puso a prueba a Ederson con otro zurdazo marca de la casa.
Upamecano, el señor de los horrores
En el minuto 34 la pequeña grieta para el optimismo de los alemanes estuvo a punto de cerrarla Upamecano, enemigo en casa, con otro error de su amplio muestrario sobradamente mostrado en esta eliminatoria. Una mano innecesaria desembocó en un penalty que, posiblemente contagiado por la cercanía con el central de los horrores, falló sorprendentemente Haaland. Ni portería encontró su disparo. Sané cogió la bandera de su equipo para guiar a sus compañeros a una misión sin apenas posibilidades de éxito. Sin duda, él era el principal estilete de los muniqueses con Coman de fiel escudero. El Bayern estuvo cerca de marcar un par de veces antes del descanso pero se fueron al vestuario de vacío y el City relamiéndose y oliendo su tercera semifinal en tres años.
En la segunda parte el toro bravo de la primera salió ya anestesiado. El reloj era su peor rival y el marcador una losa. Sin embargo, el que más se empeñó durante toda la eliminatoria en que pasara el City fue Upamecano. Un resbalón inoportuno cuando Haaland controlaba un balón en el área le costó el 0-1 ha su equipo. Su actuación fue más desastrosa incluso que en la ida, algo que parecía difícil de superar. Con un central así el milagro es aspirar a ganar algo. Su desempeño fue penoso y digno de darle la carta de libertad ya mismo. Si los de Guardiola ganan la Champions tendrá tanto derecho como cualquier jugador del City a cobrar la prima por el título. Ha sido el caballo de Troya citizen.
El resto del partido fue ver pasar el tiempo y en el palco del Bayern, seguramente, algún directivo aprovecharía para ir al baño y darse algún cabezazo contra la pared lamentándose de un fichaje ruinoso. Kimmich no erró un penalty por mano absurda de Akanji y su equipo, al menos, evitó la derrota. Haaland, De Bruyne, Silva y Guardiola se medirán en dos semanas a los reyes de Europa.
Jugador Flashscore del partido: Bernardo Silva
Aquí puedes ver todos los detalles del encuentro: Bayern - City