El Barça no está fino, pero va dando señales de mejoría. No hace falta ser un cirujano del fútbol para saber que necesita un bisturí y curar ciertas heridas internas que le impiden fluir con claridad en su juego. Y no es porque Xavi no intente cosas, como poner a Joao Cancelo de lateral zurdo. Por decisiones así, el portugués se cabreó con Guardiola. Aunque eso es otro cantar porque si funciona de maravilla... 

Esa decisión fue clave porque Cancelo asistió y marcó, inventándose el gol del empate dos minutos después de que el Oporto se hubiera adelantado.

Es uno de los síntomas claros de la debilidad azulgrana, la de ir por detrás en el marcador. Con Pedri y Gündogan en horas bajas, con De Jong ejerciendo de pivote defensivo, el equipo no carburaba. Sólo funcionaba a impulsos. Los que permitieron a Raphinha y Joao Félix disfrutar de las primeras llegadas con peligro. 

Era el Oporto el que más y mejor amenazaba. Avisó Taremi, que marcó en claro fuera de juego. Obligó Galeno a volar a Iñaki Peña. Y a la tercera, tras otra buena intervención del portero, fue Pepé -que no el muy silbado Pepe- quien le puso más ganas que De Jong para llegar al rechace y marcar el 0-1. 

Con el triunfo antes del Shakhtar ante el Amberes, la clasificación se le complicaba al Barça. Pero no dio tiempo ni a pensarlo. Cancelo pidió el balón, rompió con facilidad a Joao Mario y disparó cruzado para marcar un soberano tanto. 

El pronto empate volvió a animar a los culés, que recuperaron la presión alta, provocando el regalo de Diogo Costa que ni Pedri ni Raphinha, especialmente éste, supieron aprovechar. Y menos mal que Peña volvió a lucirse a disparo de Varela porque las cosas pudieron ponerse muy feas antes del descanso.

Los Joaos 

Viéndole las orejas al lobo, fue el Barça el que salió a morder. Y ahora sí recuperó parte de su esencia. A los diez segundos, ¡a los diez!, Joao Félix estrelló el balón en el travesaño. No se asustó el Oporto, tirando de velocidad en las contras, obligando a Araujo a un esfuerzo descomunal ante Taremi. El partido estaba eléctrico, pero con un puntito más a favor de los blaugrana. 

Y entonces se encontraron los Joao. Como al comienzo de temporada. Félix para Cancelo, Cancelo para Félix y el 2-1 en el marcador. Precisión quirúrgica y respiro en Montjuic. 

Eran los mejores momentos del Barcelona, con Cancelo incansable y demoledor, con un buen Joao Félix... y con un pésimo Lewandowski. Por eso no cerró el encuentro, porque el polaco ahora estorba más que ayuda. Y el Oporto, tras superar el asedio, se volvió a soltar en ataque y rozó el empate en un par de oportunidades. La mejor, a diez minutos del final, cuando Pepé no pudo rematar con Iñaki Peña ya vencido. 

Aún hubo tiempo para que Diogo Costa le negase un golazo de semichilena a Raphinha e Iñaki Peña hiciera lo propio con un disparo de Conceiçao al límite del tiempo. Así que con 2-1 se llegó al final de un encuentro que le da la clasificación a octavos al Barça, la primera con Xavi en en banquillo. El Oporto se la jugará con el Shakhtar en la última jornada. 

Jugador Flashscore del partido: Joao Cancelo (Barcelona). 

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