Y es que la Real Sociedad empezó la temporada maravillando a Europa. Empatando ante el Inter, vigente subcampeón de la competición, pero mereciendo más y con exhibiciones ante Salzburgo y Benfica, por partida doble.
Los de Imanol acabaron por delante de los nerazzurri en el grupo. Algo que tiene un mérito enorme, viendo la temporada que están haciendo y cómo están dominando el campeonato italiano.
En octavos llegaba un Paris Saint-Germain lejos de su mejor momento. Había finalizado segundo en su grupo, muy complicado eso sí, por delante de Milan y Newcastle y por detrás del Borussia Dortmund. Pero en San Sebastián había ilusión por competir la eliminatoria.
Sin embargo, la mejor versión de Mbappé apareció en la ida y especialmente en la vuelta, y la Real no tuvo opciones.
Una victoria en 10 partidos
Lo cierto es que la Real ha pinchado en el momento clave de la temporada. De los últimos 10 partidos disputados tan sólo ha ganado uno. En Liga ante el Mallorca e in extremis. Cuatro empates (los dos de Copa ante el Mallorca y frente a Rayo y Girona en Liga) y cinco derrotas (las dos contra el PSG en Champions y contra Osasuna, Villarreal y Sevilla en Liga).
El bajón de juego es evidente, especialmente en los centrocampistas pero también de cara al gol. Ahora sólo queda LaLiga. La Real es séptima, ahora mismo fuera de Europa, a dos puntos del sexto que es el Betis.
Techo en Champions
No obstante, los donostiarras han igualado su techo en Champions esta temporada. No así en la antigua Copa de Europa, donde alcanzaron las semifinales en la temporada 82-83, donde sólo el Hamburgo le apartó del partido decisivo.
En Liga de Campeones, en la 2003-2004 la Real cayó eliminada en octavos por otro equipo francés, el Lyon, después de pasar segunda de grupo, por detrás de la Juve y por delante de Galatasaray y Olympiacos.