Obviamente, habrá que pagar prima de fichaje y comisiones varias a representantes, pero no es nada fácil encontrar en el mercado a un subcampeón del mundo con las cualidades del galo y que encima llegue sin tener que pagar un traspaso que, en su caso, sería millonario.

Ese dinero lo perderá el cuadro germano, cuyo director deportivo, Roland Virkus, ha reconocido este jueves que ya no hay nada que hacer y que Marcus Thuram se marchará a final de temporada, como Bensebaini.

"Estábamos en contacto con ambos jugadores. Es una pena que no vayan a extender sus contratos a punto de expirar, porque ambos nos han dado mucho en los últimos cuatro años", ha desvelado.

Sin ir más lejos, Thuram es el segundo máximo goleador de la Bundesliga con 13 goles. Un jugador rápido, habilidoso y con potencia y olfato goleador.

No sólo el Barça, donde jugó su padre, lo quiere. También aparece en las quinielas del Atlético de Madrid, así como en equipos de la Premier. De momento, lo que se sabe es que no seguirá en el Mönchengladbach.