Hay fichajes que no necesitan adaptación, que rinden de inmediato. Otros, en cambio, ya sea por el nuevo entorno o por el idioma, necesitan muchos meses para rendir a su nivel, si es que lo consiguen. Es esto último lo que le está pasando al exfutbolista del Granada.
Un Bryan Zaragoza que podría escribir un libro con el carrusel de emociones que le está tocando vivir este curso. Debutó con la selección española mientras su equipo no arrancaba (acaba de destituir a su segundo entrenador de la temporada). Firmó con el Bayern a partir de la próxima temporada con la condición de quedarse ésta para ayudar a lograr la salvación del equipo nazarí. Semanas después, movido por las lesiones y los malos resultados, los bávaros lo reclamaron antes de tiempo y con urgencia. Y pagaron de más.
Sin embargo, en casi dos meses en Alemania, apenas ha jugado. La gota que ha colmado el vaso es que no fue ni convocado para jugar contra el Darmstadt, colista de la Bundesliga. Si no juega contra el último...
Todo eso es lo que ha llevado al delantero a pensar en su situación. Lo bueno para su futuro es que habrá nuevo entrenador desde julio. Porque Tuchel, en su pulso con la dirección deportiva, está claro que no lo quiere. Pero corre el riesgo de quedarse sin opciones de mostrar sus cualidades. Apenas ha jugado 35 minutos repartidos en dos encuentros de liga.
Mientras tanto, según ha podido saber Flashscore, el futbolista está estudiando alemán a diario, intentando integrarse de la mejor manera posible. También inglés. Aunque si la situación no cambia, hay clubes que siguen sus pasos desde hace tiempo y no verían nada mal aprovecharse de una posible cesión o incluso venta a bajo precio. El Barça, por ejemplo, es uno de ellos.