Kvitova visitó la sede de Livesport, la empresa matriz de Flashscore, el viernes pasado durante el evento semanal Smart Friday y respondió a las preguntas de la audiencia.

Terminaste la temporada como la mejor jugadora checa en el puesto 16 del ranking de la WTA y también ganaste el título número 29 de tu carrera. ¿Cómo evaluaría su año tenístico 2022?

“Después de todo lo que me ha estado pasando desde principios de año, cuando me lesioné, mi juego no iba nada bien e incluso me estaba cansando un poco de todo, terminé sintiéndome muy positivo. "Estoy contento de haber regresado de eso y estoy jugando, jugando y jugando de nuevo. La temporada no fue bien para nosotros los checos en general, pero por otro lado tenemos muchos jugadores jóvenes. Sin embargo, mi temporada fue exitoso y el título que gané en hierba fue la guinda del pastel".

¿Cómo pasas tu tiempo libre ahora, ya que tu temporada ha terminado?

"Después del último partido volé para unas vacaciones que duraron exactamente cuatro días. Principalmente quería irme a casa porque siempre estamos fuera y probablemente lo que más extraño es mi casa. Especialmente mis padres y hermanos que tienen hijos y yo soy tan tía, volaré a Mónaco con una de mis sobrinas esta noche (viernes) por unos días, estaré cuidando, mostrando lugares... Eso es todo, la próxima semana, 14 de noviembre, la preparación para la nueva temporada comienza. Pasa tan rápido".

¿Echas de menos el deporte en este momento?

"Ahora tengo que empezar a hacer algo de nuevo, para que la práctica no sea demasiado dolorosa. Pero lo será de todos modos, así que no importa. Pero no hago nada durante esas dos o tres semanas. Estoy disfrutando no tener que hacer nada. Ayer (jueves) fui un espectador pasivo en Slavia Praga".

Viajas mucho durante todo el año, ¿tienes algún consejo para hacer que los largos momentos en el camino sean más agradables?

"Estoy de viaje probablemente más de la mitad del año. He estado sufriendo en los aviones durante los últimos dos años. Me estoy asustando y no me está haciendo ningún bien. Yo diría que probablemente sea la edad. Me gusta para leer o ver telenovelas y películas. Pero, sinceramente, no lo disfruto mucho. Trato de dormir, eso es lo mejor. Pero tampoco soy muy bueno en eso. Los vuelos más largos son más exigentes en todos los sentidos".

Has pasado de ser una chica común a una celebridad mundial. Empezaste a jugar en el piso del gimnasio con tu papá... ¿Cuál fue el cambio más difícil para ti?

"Siempre jugué en casa en un pequeño pueblo de seis mil personas y generalmente era el quinto en el país. No fue hasta los 15 o 16 que despegué y fui el mejor del país a mi edad. Fue entonces cuando Prostejov quería que me transfiriera. Después de un tiempo me enteré de que mi madre tenía que intervenir y dijo que tenía que irme. Tenía miedo, solo estaba en casa hasta ese momento, jugando al tenis solo por diversión. De repente me imaginé que tenía que irme. a clases de fitness, a gimnasia... Me costaba imaginarme ir a una ciudad más grande donde habría más gente, más tenistas... No tenía ninguna ambición de ser tenista profesional en ese momento. No me di cuenta de eso hasta después de unos meses en Prostejov. Tenía más miedo del salto al gran mundo del tenis".

¿Cuándo empezaste a darte cuenta de que te estabas convirtiendo en una estrella? En 2007 jugaste tu primer torneo WTA y para 2011 ya habías ganado Wimbledon...

"Fue un shock especialmente por mi inglés porque no lo hablaba muy bien. Tuve que conseguir un tutor. Fue bastante rápido, principalmente porque cuando comencé a nivel profesional, gané mis primeros torneos de inmediato. El Los saltos eran grandes, comencé a darme cuenta más o menos en 2010 cuando estaba en las semifinales de Wimbledon, pero luego Tomas Berdych estaba en la final, así que comenzaba a ser conocido, pero Tomas seguía siendo Tomas, todavía es irreal. "Gané Wimbledon un año después, así que fueron como dos grandes saltos. Semifinales y ganar es una gran diferencia. No es por nada que dicen que la historia solo recuerda a los ganadores. Todos me dijeron cómo cambiaría todo, cómo yo tendría que cambiar. Pero siempre dije que no, que no quiero. Pero cuando gané Wimbledon a la edad de veintiún años, creo que pasé dos o tres años preguntándome a dónde pertenecía y quién era porque no No creo que realmente perteneciera a este mundo. Soy diferente de lo que los fanáticos pueden ver en la televisión. Pero simplemente sucedió."

¿Aproximadamente cuántas raquetas usas al año?

"No los rompo (risas). He hecho los cálculos en mi cabeza ahora, tengo 24 para el año, cambiando un juego de seis cuatro veces al año. Espero haber hecho los cálculos correctamente. Yo Empiezo con un conjunto y luego siempre los cambio a arcilla, a césped y de nuevo a cemento. De alguna manera siempre funciona, principalmente solo para cambiar la superficie. Pero siguen siendo del mismo tipo".

¿Tienes recuerdos más fuertes de Wimbledon de ganar los títulos o de estar comprometido?

"Ni siquiera puedes comparar eso. El compromiso fue completamente inesperado, realmente no sé qué sucedió. Realmente no lo recuerdo, lo sorprendida que estaba. Fue muy rápido, pero por supuesto hermoso. Ganar Wimbledon es un logro de tenis, este es un logro de vida. Realmente no se compara".

Abriste tu propio salón de la fama en tu ciudad natal de Fulnek a finales de julio, ¿cuál es la respuesta de los fans al respecto?

"Es un poco pequeño, pero es muy bonito y acogedor. Le queda un poco a Fulnek. Por supuesto, hay trofeos de Wimbledon y de todos los demás torneos. Pero también hay aretes de la primera final de la Fed Cup, con un león en nuestro trofeo nacional". colores. Todas las chicas lo recibieron como regalo de un amigo mío. También hay trofeos para el juego limpio, que se deciden por los votos de los otros tenistas".

Ha ganado el Premio Karen Krantzcke, el premio a la deportividad en el circuito de la WTA, en ocho ocasiones. ¿Es eso valioso para ti? Especialmente cuando lo otorgan tus rivales...

"Tengo que decir que me ha sorprendido mucho todos los años. Es muy agradable. Estamos juntos todo el tiempo, todos los días, todas las semanas, somos una gran familia de tenis. Nos vemos todo el tiempo y me encuentro triste cuando alguien no tiene una relación perfecta entre nosotros. Y, por supuesto, eso sucede. Es más difícil para las mujeres en ese sentido y no solo en el tenis".

¿Ha cambiado el tenis femenino de alguna manera en el tiempo que llevas involucrada?

"Diría que sí. Cuando comencé en la gira, era muy agresivo y mentalmente desafiante. Ahora es más físico, hay rallies más largos, las bolas son más lentas, las superficies también son más lentas".

¿Y cómo ve la posible modernización del tenis? Sets más cortos, juegos sin ventajas...

"Soy bastante conservador al respecto. Realmente no me gusta. En dobles no me importa tanto, al menos sabes que hay dos sets y luego casi se termina a menos que juegues un súper desempate". Me parece que estos cambios son más beneficiosos para los jugadores más débiles de un partido, porque pueden darle la vuelta al partido más fácilmente. Al menos así lo veo en dobles, donde no sabes quién ganará".

Roger Federer se despidió recientemente de su carrera tenística, ¿tiene algún recuerdo personal de él?

"Las dos veces que gané Wimbledon, lo ganó Djokovic. El último recuerdo que tengo de Roger es de las celebraciones del centenario de la cancha central de Wimbledon. Roger voló para la ceremonia y mientras esperábamos afuera de las puertas de la cancha central conversamos. charlando conmigo, totalmente genial (risas). Fue genial. Personalmente, me gustan mucho Roger y Rafa Nadal porque son educados, siempre me saludan, sonríen, son humanos".

¿Qué tipo de bailarín es Djokovic? Los ganadores, siguiendo la tradición de Wimbledon, abren el baile de campeones bailando juntos...

"Por suerte no bailamos (risas). Me funcionó muy bien porque bailar y yo es una mala combinación. Probablemente nunca me veas en Bailando con las estrellas. De lo contrario, Novak siempre ha sido muy agradable, pero porque es domingo cuando tocan, llegaba tarde. Siempre había una espera para él, y era tan rápido. Pero por suerte no bailamos, esa tradición se abandonó antes”.

¿Qué pasa entre salir de la pista central como ganador y llegar al famoso balcón?

"Sinceramente, no recuerdo mucho porque fue un gran susto. La primera vez que gané, no sabía nada de lo que estaba pasando. Después de esa ceremonia, caminas por toda la cancha central y se muestra el trofeo a la gente en la audiencia también. Luego sales de la cancha y vas alrededor de un tablero donde te tomas una foto con tu propio nombre. Esto es seguido por el corredor de los miembros, al que aparentemente solo pueden ingresar los miembros del club. Recuerdo este muy bien, porque justo al comienzo estaban Martina Navrátilová y Jana Novotná, quienes me felicitaron por el título. Eso fue muy lindo. Luego vas al balcón donde se muestra el trofeo".

¿Cómo encuentras la motivación para la nueva temporada?

"La motivación sigue ahí, por lo que sigue siendo bueno en ese sentido. La mayor motivación es obviamente el Grand Slam. Pero al mismo tiempo sé lo desafiante que es. Últimamente, me he estado diciendo a mí mismo que quiero mantenerme saludable". Cuanto más envejezco, más siento mi cuerpo y más consciente soy de él".

¿Qué pasa con los goles que no son de tenis?

"Veremos qué trae el tiempo (risas)".