Balde ha aterrizado sobre las 16 horas en el Aeropuerto Hamad International de Doha en un vuelo procedente de Barcelona, a donde se desplazó desde la concentración de la sub21 en Sevilla.
No se sentirá extraño en su primer día con la selección española absoluta. Con Jordi Alba, su competencia en el Barça, y el resto de compañeros azulgrana como Gavi, Pedri, Busquets, Eric García, Ansu Fati y Ferran Torres, para el lateral será como estar por casa.
"Es un sueño para mí, aún no me lo creo. Estoy para aprovechar la oportunidad al máximo. Ni hace un año ni hace tres meses ni hace una semana me lo podía imaginar, no me lo creo", comentaba emocionado el barcelonés nada más aterrizar en Catar.
Antes había tenido tiempo de hablar "con Ansu y con Nico Williams, que me llevo muy bien con ellos. Me han felicitado y estoy muy contento de estar con ellos".
Es normal no créerselo. En verano, el plan del Barcelona era cederlo, pero la tardanza en incorporar a Marcos Alonso le hizo ganarse un sitio en el primer equipo. Su buen hacer le valió para debutar en septiembre con la sub21 y ahora recibe su primera citación con la absoluta. "Mi primera convocatoria y que sea directa a un Mundial, uf, todavía no me lo creo", señalaba.
Y es que apenas hace 24 horas que se enteró del cambio de planes para con él. "Estaba en la habitación con Pablo Torre y me llamó Luis de la Fuente y me dijo que me venía para aquí (Catar)".
Ahora ya se ha puesto en clave Mundial y tiene un deseo. "Que nos llevamos la Copa a casa". Un mensaje ambicioso de alguien que también lo es en su aún corta carrera profesional.