Un avión privado, una ciudad entera paralizada, una recepción que frena la llegada de viajeros en un aeropuerto importante de Oriente Próximo. Tiene 37 años, pero Cristiano Ronaldo aún maneja esa capacidad para mover las masas que endulzó durante casi una década a las gradas del Santiago Bernabeú. El portugés emprende un reto y este martes, después de un mercado lleno de contratiempos, ha sido presentado como nuevo jugador del Al-Nassr.
Arabia recibió a Ronaldo con los brazos abiertos. La cálida bienvenida contrasta con la tormentosa partida que dejó en Old Trafford. La entrevista que él concedió sin autorización del Manchester United finiquitó su segundo proceso en el histórico inglés.
Disputó el Mundial como agente libre. Esperó el llamado de algún club top del viejo continente pero la realidad fue otra. El luso se quedó con pocas opciones y entre ellas apareció la millonaria oferta del Al-Nassr, que sacó la casa por la ventana y se adjudicó sus servicios por dos temporadas.
El ruido siempre rodeó el entorno de Ronaldo. Deslumbró en el Real Madrid. Falló en la Juventus. Salió de mala manera del Manchester United. Está acostumbrado al espectáculo. Arabia Saudita conoce el show. Tiene los recursos suficientes y, con tranquilidad, estructuró una base con la que pretende hacer sentir a la nueva estrella de Oriente Próximo como en casa.
"No me preocupa lo que diga la gente, hoy en día e fútbol ha evolucionado y es muy competitivo. No es el final de mi carrera", dijo Ronaldo en su presentación.
El portugués, por supuesto, expuso su alegría por este nuevo reto. La competitividad y la preparación física son dos características de la Liga Árabe. "El mundo del fútbol está muy avanzado, la liga es muy competitiva y estoy contento de estar aquí. Tengo ganas de jugar, incluso mañana si el entrenador me da la oportunidad", explicó.
Ronaldo aceptó que su etapa en el fútbol europeo está concluida. El portugués ve su futuro cercano en Riad y afirma, con certeza, que buscará títulos desde nuevos para el Al-Nassar. "Mi trabajo en Europa está hecho, estoy orgulloso de un nuevo reto".