Mejor, imposible es el título de una gran película, pero también podría llamarse así al inicio de una nueva etapa en el Real Madrid, el supercampeón ACB. Atrás queda la convulsa salida de Pablo Laso. El presente se llama Chus Mateo, quien fuera su ayudante durante tantos años, y que se ha estrenado reteniendo el título y batiendo al eterno rival, el Barça por 89-83. 

Por eso, era lógica su satisfacción al final del partido. "Ha sido muy bonito para el espectador. El baloncesto lo amamos porque es un espectáculo emocionante, con alternativas, donde uno se va y otro vuelve, y que no se ha decidido hasta la prórroga. El Barcelona ha hecho un gran partido, ha sido un digno rival y ha podido ganar también, aunque al final lo hemos hecho nosotros". 

Empezar con buen pie era importante, especialmente para la confianza del grupo y del club. "Lo es porque es el primer título que había sobre la mesa, lo hemos conseguido nosotros. No ha sido un muy buen partido porque hemos tenido muchos errores y fallos que se pulirán a lo largo del año, cuando sigamos trabajando juntos. Pero hemos mantenido el corazón del Madrid, hemos sido capaces de volver cuando el partido se ha complicado con 12 abajo. Entonces, estoy muy contento". 

De cara al futuro más inmediato, Mateo ha dejado claro que el nivel aún puede mejorar. "Tenemos buenos jugadores para hacer cosas buenas, hay que trabajar y conocerse, pulir el talento. Cuando hemos empezado a defender juntos, ahí se ha notado que como equipo ganamos mucho".