El buen comienzo de las Guerreras, que buscaban el liderato en solitario del grupo, hizo prever que sería un encuentro fácil. Y lo fue después de un susto provocado por la falta de constancia en la zaga, a lo que siguieron casi 10 minutos sin anotar un gol.
Con 5-6, el seleccionador español, Ambros Martín, hizo algunos ajustes y la presencia de Eli Cesáreo y Paula Arcos, junto a las paradas de Merche Castellanos terminaron de ajustar la defensa y facilitar los contragolpes para comenzar a abrir hueco con un parcial de 6-11 en el último cuarto de hora previo al descanso.
Salida arrolladora
Con 11-17 comenzó una segunda mitad en la que España salió en tromba con un 0-6 en los nueve primeros minutos, en los que María Prieto estuvo finísima, que sentenció definitivamente el duelo con el 11-23 que reflejaba el marcador.
Aún quedaban muchos minutos por disputarse, pero la victoria estaba más que certificada. Este domingo, en Lanzarote, ante las mismas rivales, podría quedar la clasificación casi garantizada. O incluso sin el casi si Azerbaiyán pierde ante las lituanas.
Barbosa, con siete tantos, y Arcos, con cinco, fueron las máximas anotadoras de las Guerreras. Ristovska, con seis, dos de penalti, fue la mejor de las balcánicas.