Es algo de lo que se viene hablando hace varios meses, desde que comenzaron las negociaciones entre Jordan y el citado grupo, que ya posee desde 2019 acciones de la franquicia. Y parece que las conversaciones están ya en su punto final con un acuerdo que podría elevarse por encima de los ¡tres mil millones de dólares!.
La aventura de Jordan como propietario comenzó en 2006 cuando se hizo con un paquete accionarial mínimo de los por entonces denominados Bobcats. Cuatro años después invirtió 275 millones de dólares para hacerse con la franquicia, de la que vendió una mínima parte a la sociedad de Plotkin y Schnal en 2019.
Una gestión deportiva pésima
Y ahora parece que el considerado por muchos como mejor jugador de todos los tiempos se ha cansado de fracasar en el ámbito deportivo. Durante su etapa, sólo ha llegado a los playoffs en tres ocasiones, y en todas ellas perdieron en primera ronda.
Ha desperdiciado grandes picks en los drafts y no ha sido capaz desde los despachos de reconducir la situación o de rodearse de gente capaz de hacerlo.
Aunque se quedaría con algunas acciones, la mayoría quedará en manos de otro grupo que es el que se encargará de tomar las riendas y gestionar la entidad de Carolina del Norte. Su ganancia económica, además, no tiene desperdicio pues Jordan se embolsaría más de dos mil millones de dólares.