Roger Grimau ya cuenta con más efectivos para continuar preparando de la mejor manera posible el primer torneo oficial del curso 23/24, la Supercopa ACB, que se celebrará este año en Murcia. Antes, este lunes, la semifinal de la Lliga catalana ante el Girona. Y el martes, la final o la de consolación. 

Parece pronto para que ya jueguen los nuevos sus primeros minutos, especialmente después del desgaste por su participación en el Mundial con España. Más posible que guarden fuerzas, y les dé tiempo a aprender sistemas, para el sábado 16 de septiembre, cuando se enfrentarán al Real Madrid en la semifinal del torneo supercopero. 

Ese día habrá morbo de los grandes. Willy Hernangómez, madridista confeso que ha dejado los sentimientos atrás para volver a sentirse importante tras su paso por la NBA, es quien más llama la atención. Será el referente en la zona, el pívot que tendrá que dominar en ambos lados de la cancha. 

Joel Parra, por el que se pagó la cláusula de rescisión al Joventut, le podrá echar una mano y también apunta a importante como 4 abierto. 

Y, por supuesto, la Mamba vasca, un Darío Brizuela que era el referente ofensivo en el Unicaja y que tendrá que modificar ese rol en Can Barça. 

Junto a ellos, como cicerone, Abrines, que apunta a ser el capitán blaugrana para esta campaña. 

Para la semana que viene se espera el regreso de Rokas Jokubaitis, el último de los mundialistas.