La evidencia de los tres días de pruebas en el circuito de Sakhir la semana pasada fue que los campeones, ganadores de todos menos uno de los 22 grandes premios del año pasado, estaban listos para continuar donde lo dejaron.
A pesar de que el director del equipo, Christian Horner, lucha por su futuro ante las acusaciones, que él niega, de una empleada sobre su conducta, Red Bull se ha mostrado tranquilo.
Ferrari, Mercedes, McLaren y Aston Martin han hablado bien de sus nuevos coches, confiando en que se hayan eliminado los problemas técnicos y se haya mejorado el rendimiento, pero las pruebas reales aún están por llegar.
La sospecha es que cuando caiga la bandera el sábado por la noche, con las dos primeras rondas de la temporada en Oriente Medio celebradas un día antes de lo habitual para adaptarse al Ramadán, Red Bull será el primero en cruzar la línea de meta.
Como el director del equipo McLaren, Andrea Stella, dijo a los periodistas en Bahrein: "Hayun coche que parece haber encontrado un gran paso. Por desgracia, (es) el coche que ya fue el más rápido el año pasado".
BOTONES DE PÁNICO
La esperanza, para los aficionados que desean carreras más reñidas en cabeza y anhelan un cambio tras la racha de 38 victorias de Red Bull en las últimas 44 carreras, es que la diferencia -si es como se teme- se reduzca a medida que avance la temporada.
El reglamento se ha mantenido estable durante un tiempo y eso, en sí mismo, suele provocar una reducción de la parrilla.
"Ahora hay más carreras, así que hay más tiempo en pista, más datos, más comprensión, más mirar a otros coches y ver qué desarrollos traen", dijo a Reuters el piloto australiano Daniel Ricciardo.
"No creo que nadie esté pulsando ningún botón del pánico. Es una temporada larga y los desarrollos pueden hacer grandes cambios".
Ferrari, el único equipo que superó a Red Bull el año pasado, fue el más rápido en los entrenamientos, pero Mercedes también se mostró animado por un coche mucho menos "rencoroso" que su predecesor.
"Nos vemos bien", dijo el director técnico de Mercedes, James Allison, tras las pruebas. "No creo que sea una sorpresa para nadie que (Red Bull) tenga las narices y quizás un poco más de cara a los que nos persiguen.
"Pero creo que haremos un buen papel en la persecución y espero que nos desarrollemos con fuerza a lo largo del año".
ESPECULACIÓN SOBRE LOS PILOTOS
Esta temporada será la despedida del siete veces campeón del mundo Lewis Hamilton de Mercedes, antes de que el piloto más laureado del deporte se marche a Ferrari en 2025 como sustituto del español Carlos Sainz.
Quién ocupe el asiento de Hamilton dará mucho que hablar en los próximos meses, al igual que la incertidumbre sobre el futuro compañero de Verstappen, ya que el mexicano Sergio Pérez termina contrato a finales de este año.
Las especulaciones se arremolinan antes de que una rueda haya girado con rabia y, con más de la mitad de la parrilla llegando al final de los contratos, correrán y correrán.
China regresa por primera vez desde 2019 y la italiana Imola vuelve después de que la carrera del año pasado tuviera que ser cancelada por inundaciones.
Habrá de nuevo seis fines de semana sprint, con Miami y Shanghái como novedades, y un formato revisado con la carrera de 100 km celebrada el sábado antes de la clasificación para el gran premio del domingo.
No hay pilotos novatos y, sorprendentemente, no ha habido cambios en las alineaciones desde finales de 2023.
Hay nuevos jefes de equipo, con el favorito de Netflix "Drive to Survive" Guenther Steiner reemplazado por Ayao Komatsu en Haas y Laurent Mekies ahora a cargo de la renombrada Visa Cash App RB (anteriormente AlphaTauri).
Alfa Romeo, dirigida por Sauber, compite ahora como Stake F1, donde las leyes sobre apuestas lo permiten.